Colocan letreros, pero no reparan alcantarillas rotas en Agua Dulce

​En la colonia Benito Juárez, desde hace más de 6 meses las alcantarillas de varias calles se encuentran rotas y han generado deslaves, mientras que las autoridades municipales se han limitado a colocar letreros de advertencia en donde indican que están reparando, aunque no se advierte la presencia de personal en el lugar.

Los letreros, propiedad del Ayuntamiento de Agua Dulce, indican: “Molestia temporal. Soluciones permanentes. Gracias por su comprensión” como una forma de justificar los cierres y demoras en las vialidades, no obstante, desde hace más de un mes que se colocó la advertencia, no se ha procedido a reparar el área dañada.

Diario Presencia ya había documentado a principios de año que en calles como Vicente Suárez, Guillermo Prieto o Francisco Villa se encontraban sumamente dañadas en un tramo en donde pasa un canal de aguas negras cubierto con una alcantarilla, pues las estructuras de metal cedieron con el peso de los vehículos que cruzan la zona.

Aunque la previsión de la estructura de metal es que aguanten el tránsito vehicular, la mala calidad del material elegido en anteriores administraciones y la falta de regulación del paso de vehículos demasiado pesados en la zona urbana, terminaron por romper las rejas a pedazos.

Una de las calles más dañadas es la Vicente Suárez, puesto que en menos de tres años ha quedado con la circulación cortada entre las calles 5 de febrero y Emiliano Zapata, pues la alcantarilla se derrumbó completamente en un carril, mientras que en el otro pedazo está a punto de caer.

Imágenes de la vista de calle de Google, con fecha de toma de mayo de 2013, permite ver que el alcantarillado —actualmente roto— de estas calles de la colonia Juárez se encontraban en buen estado en aquel momento, por lo que su deterioro se generó en los últimos 24 meses, aproximadamente.

A pesar de que ha pasado un largo tiempo desde que las rejas se hundieron o cayeron completamente en el canal, el Gobierno municipal de Agua Dulce sólo ha dejado letreros de metal para evitar que los automovilistas crucen y sufran un desperfecto en sus vehículos, sin intención visible de reparar los tramos.

La llegada de las lluvias puede traer mayores problemas a cientos de habitantes de las calles mencionadas, pues además de permitir el paso de unidades, las rejas tenían la función de evitar que la basura acabara en el canal de aguas, que ahora está azolvado por esta razón y en breve podría ocasionar encharcamientos por anegación de aguas negras y pluviales.​