A ocho meses del inició de las nuevas administraciones, pocas comunas han iniciado obra pública, sin embargo, en los meses de junio y julio 31 municipios del Estado contrataron deuda por un monto superior a los 400 millones de pesos con el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras).
De acuerdo a información de la pagina
http://www.shcp.gob.mx/Estados/Deuda_Publica_EFM/Paginas/registro.aspx, donde se desglosan los compromisos financieros de las entidades y los municipios, se explica cómo una treintena de alcaldes contrató pasivos por montos que van desde los 50 millones de pesos en el caso de Tuxpan, hasta 2 millones 600 mil pesos para Tlacojalpan para la realización de obras públicas.
Los plazos para el pago de los créditos, que obligan a dejar en garantía las participaciones federales, van de 40 a 34 meses, es decir 2 años 10 meses a 3 años seis meses, es decir, lo que resta de las actuales administraciones municipales.
De acuerdo a lo publicado en el registro de Obligaciones y Empréstitos de Entidades y Municipios desde el pasado 10 de junio se inició con la autorización de adelanto de recursos del Fondo de Infraestructura Social Municipal que asciende a más de 5 mil millones de pesos para los 212 municipios, y que permite el adelanto, hasta en un 25 por ciento de lo que van a recibir en el cuatrienio, para que puedan consolidar obras.
El primer municipio que recibió el crédito que pagará en 40 meses fue Altotonga, que concretó un préstamo de 45 millones 600 mil pesos, además esta Tlacolulan que le autorizaron 7 millones 100 mil pesos; Atzacan con 41 millones de pesos.
A Ignacio de la Llave se le autorizaron 10 millones 880 mil pesos; Atzacan 13 millones de pesos, Puente Nacional 8 millones de pesos; Huatusco 26 millones 600 mil pesos; Alto Lucero 12 millones de pesos; Tlalnehuayucan 6 millones de pesos e Ixtaczoquitlán 23 millones de pesos y Castillo de Teayo 14 millones de pesos.
En el mes de julio, apenas el pasado 16, se aprobó créditos para Las VIgas ($9.886.000), Zacualpan ($11,660.000), Banderilla ($4,512.000), Cosautlan ($12,306.000), Hidalgotitlán ($3.450.000), Jamapa ($3.880.000), Pajapan ($ 15.998.000), Atoyac($11, 284.999), Paso de Ovejas ($12,553.999) y Tancoco ($5,196,000).
También se aprobó para Tecolutla ($19,199,000), Tuxpan($57, 395,000), Tancoco($57,077,000), Tampico Alto ($13,306,999), Cosamaloapan ($20,046,000), Santiago Sochiapa ($10,782,000), Acayucan ($45,388,000), Tlacojalpan ($2,671,999), Tenochtitlan ($4,552,000) y Chalma($ 10,325,999).
Piden transparencia en el manejo de recursos
Sobre ese tema el economista y académico de la Universidad Veracruzana, Rafael Arias Hernández, destacó la importancia de que los municipios tengan recursos frescos, pero se hace necesario que transparentar su aplicación a la sociedad, a fin de evitar que el dinero se gaste en obras inservibles o de relumbrón.
Comentó que el dinero se tendrá que destinar a acciones directas en beneficio de la población, “desde luego que hay un riesgo y lo importante es decirle a la ciudadanía que la utilización de estos mecanismos financieros debe ser muy transparente y la rendición de cuentas debe ser puntual”.
En ese sentido, recomendó a los pobladores de la treintena de demarcaciones revisar qué tipo de obras se van a realizar, dónde van a estar, cuál será el costo-beneficio, la programación de las mismas y la fecha de conclusión.
“Los municipios que asumen deuda a corto plazo, contra fondos federales convenidos, tiene también que transparentar sus acciones y rendir cuentas y en este caso con mayor razón, para que no sean obras de relumbrón, de beneficio para unos cuántos y desde luego informar periódicamente los avances”.
Porque de lo contrario, ironizó, “las obras se hacen eternas, se incrementa el costo y terminan sumergidas”, señaló en clara alusión al túnel de Coatzacoalcos.