El hospital “Doctor Pedro Coronel Pérez”, se fundó gracias al reclamo ciudadano, cansados de que para todo tipo de lesiones, heridas o problemas de salud, era necesario viajar a la ciudad de Coatzacoalcos.

 

Desgraciadamente a casi cuatro años de operación, pasa lo mismo, ante la serie de carencias en equipo material y humano.

 

Pero encima de eso,  durante el corto tiempo que lleva de servicio este hospital, derivado de la política y de los escasos recursos con los que cuenta, ha tenido una serie de conflictos internos.

 

De hecho, también ha sido utilizado como una bolsa de trabajo, porque algunos políticos o funcionarios como el alcalde Renato Tronco Gómez y el diputado Marco Antonio Estrada Montiel, han tratado de acomodar a gente filial a su grupo, de ahí, que constantemente haya confrontación y se dificulte establecer un clima de armonía y tranquilidad, pues todos trabajan con el enemigo en casa y tienen que andar cuidándose las espaldas.

 

Uno de los problemas que mantienen al hospital en serios aprietos y que obliga a los médicos enviar a sus pacientes a Coatzacoalcos, es la falta de equipo, pero aquí el culpable es el ex gobernador, Fidel Herrera Beltrán, quien en agosto del 2008 vino a inaugurar el hospital, en el que presumió una inversión de 80 millones de pesos incluyendo su equipamiento  y destacó que contaría con quirófanos, tococirugía, rayos "X", laboratorio, especialidades, auxiliares de diagnóstico, medicina preventiva, servicios generales, área de recepción y de gobierno, sala de espera, farmacia y paramédicos.

 

Tristemente, el equipo que presumió el entonces gobernador de Veracruz, no pertenecía a este nosocomio, sino más bien era prestado de otros hospitales y se colocaron en este edificio para que cuando llegaran los invitados de ese día y el propio gobernador, posaran para la fotografía que difundirían los medios de comunicación.

 

A las pocas horas de marcharse, el equipo especializado fue levantado y regresado a los hospitales que lo habían prestado.

 

Hasta la fecha, esta institución no operan al 100 por ciento como tal y de seguir con esas carencias y conflictos, caerá en el riesgo de suceda lo que le pasó al hospital de Ixhuatlán, que terminó por convertirse en una clínica, lo que demerita el servicio y la oportunidad de ser equipado en beneficio del pueblo.

 

El hospital Pedro Coronel Pérez cuenta con 43 camas y tendría especialidades orientadas principalmente al cuidado de las mujeres y los niños, es una construcción de dos mil 400 metros cuadrados y tiene un helipuerto.

 

También Fidel Herrera afirmó que habrían 170 empleados que contarían con las garantías laborales que ofrece el sector salud del estado de Veracruz y el salario digno, situación que no se ha reflejado y es consecuencia de que hoy los trabajadores sindicalizados tengan tomadas las oficinas administrativas, porque tienen un sueldo de hambre, que no les alcanza para nada, pero sí les exigen y los obligan a redoblar turnos sin tener compensaciones y pagos de horas extras.

 

Una vez más, se presenta otro conflicto en esta institución cuyo fin hasta el momento se desconoce, lo cierto es que los trabajadores aseguran que no se moverán hasta tener una solución.
(Comentarios y tips a [email protected])