Qué tienen en común Pepe Yunes y la señora Karime Macías... así, de sopetón, pudiera decir que interés por ayudar a quien lo requiera, en la medida de sus posibilidades.

Pepe y Karime, más que políticos, son buena gente, ¡excelentes personas!; hasta verlos en la grilla, entre la demagogia y el discurso, es raro porque pareciera que no pertenecen a esa forma de ser y hacer política... por eso le critico a Pepe cuando usa eso de la “pasión”... él no es “un apasionado de la política”... quizás de la vida, pero de la política no.

Al menos, eso es lo que veo en común entre Pepe y Karime (permítanme el tuteo respetuoso)... sin embargo, a veces hay gente que los une y no precisamente en el afán de ponderar su bonhomía...

II
Al momento que la compresa se le retiró de su pie, ya las lágrimas rodaban por las mejillas del pequeño. Tampoco fue mucho el tiempo que pasó para que su pie se ampollara... al parecer, la improvisación de personal en el DIF, había tenido su resultado no deseado: ¡habían quemado al bebé!

El padre esperó... esperó... y esperó... y del DIF nunca hubo una atención para el pequeño y mucho menos el ofrecimiento de una disculpa...

Entonces acudió a las oficinas del DIF donde fue recibido por la presidenta del instituto familiar. Pidió una explicación y a la vez, una disculpa...

¡Qué osado! ¿Cómo una dama de tan ilustre apellido ofrecería disculpas? ¡Cómo!

A la dama se le hacía imposible escuchar lo que ese padre de familia pedía pero en un arranque de cordura, al menos así lo parecía, llamó a los que ella calificó como sus “empleados”.

¡Ah chirrión! pensó el padre. Ahora en el DIF, la gente es empleada, como si esta institución fuera un negocio. Se lo externó a la dama, quien con esos aires de aristócrata de rancho, dijo que eran sus empleados porque ella les pagaba...

III
Quien pierde la dignidad es más fácil que gane todo el dinero que pueda, pero nunca el respeto.

La dama del DIF explicó a sus “empleados” (ojo, no colaboradores), que el señor presente, era padre de un bebé que, al acudir a una consulta, le habían quemado un pie hasta provocarle una ampolla, cosa que, “en dos días, ya estaría bien...pero el señor quiere que se disculpen, ¡hínquense! si eso es lo que quiere”...

La respuesta del padre fue que no estaba pidiendo eso, que sólo quería una explicación y que mínimo, le ofrecieran una disculpa por el daño ocasionado al bebé.

Y la señora presidenta... del DIF ¡se sintió ofendida nuevamente!

IV
Karime Macías siempre ha abogado por la sensiblidad de la sociedad para con nuestros ancianos, por nuestra tercera edad, por nuestros niños... Pepe Yunes es una persona a quien no se le conoce el mínimo ataque de altanería, prepotencia, arrogancia... todo lo contrario.

Hoy, a través de este medio, quien escribe, sólo pide a Karime y Pepe que no permitan que sus nombres sean embarrados con actitudes que opacan la gran labor que, en lo personal, me consta, el DIF estatal viene realizando a lo largo de todo el estado, por un lado, y por el otro, la trayectoria del candidato a Senador, que se mantiene pulcra...

Sí... cualquiera puede presumir la amistad con Karime... cualquiera puede presumir un apellido de abolengo... o bien presumir el reconocimiento del DIF estatal a su labor... o bien ostentarse como tía del casi Senador, pero lo único que no puede presumir la presidenta del DIF de Perote, Emilia Yunes de Velázquez, es de sencillez y humildad, que eso les sobra a Karime y a Pepe... y ésas no se maman ni con cargos ni apellidos, sino con educación y amor por nuestros prójimos.

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