Hace algunos días, por la tarde, cuentan que llegó el alcalde con el “ungido”... era su presentación, su acercamiento con la raza, con el bronce, con las bases. Mientras hablaba el alcalde de las bondades del “elegido”, la estupefacción se iba haciendo presente en las caras de los presentes hasta que una mujer se alzó y gritó:

—¡No lo queremos! Es más, si va él, no cuenten con mi apoyo...
Los aplausos no se hicieron esperar, mientras el alcalde tragaba gordo junto con el “ungido”. “Calma, calma”, les pedía el edil.
La misma voz que se alzó, volvió a levantarse de nuevo, para ser más clara en sus reclamos:
—Si quiere ser alcalde, que camine la campaña con Zarrabal y entonces lo considerarían.

El edil respiró tranquilo y quiso concluir la discusión:
—Zarrabal ya lo aceptó...

A lo que la mujer replicó:
—Si ya lo había aceptado ¿por qué entonces no estaba ahí sentado junto a ellos?
Salvador Manzur calló ante el estrepitoso aplauso hacia la mujer... tanto “elegido” como edil pasaron a retirarse.

II
Esto no deja de ser una leyenda urbana, de ésas que se platican en estos momentos de efervescencia electoral, más cuando en Boca del Río, los seccionales, la militancia, la base, se siente utilizada ante el hecho de que, sin decir agua va, hablan de que les quieren “imponer” a un candidato que muy independientemente de que no conozca las calles, las colonias, sus problemas, sus necesidades, ¡no los conoce a ellos!
Para la mayoría de ellos, Sergio Pazos Navarrete no deja de ser un junior que no tiene trabajo en la militancia ¡de a devis! Insisten en que sus únicas cualidades es ser “el cuñado” de Pepe Toño Mansur y por lo tanto, “el amigo” del Gobernador.

Si bien, Raúl Zarrabal Ferat no deja de ser otro junior, el chaparrito se ha fletado a la friega, ha taloneado y entre la gente, es lo que se pudiera decir ¡raza! ¡buena onda! ¡a todo dar! a diferencia de Pazos, quien quizá tenga los mismos atributos que le confieren a Zarrabal, pero entre los “nais”, “los fresa”, “los hijos de papi”.

III
En el PRI estatal lo niegan, pero en Boca del Río se cuenta:
Hace como una semana, un contingente de 50 presidentas de sección se movilizaron rumbo a Xalapa. Querían entrevistarse directamente con Erick Lagos, el dirigente del PRI estatal, para externarle su posición: Quieren de candidato a Raúl Zarrabal, no a Sergio Pazos.

Dicen que Salvador Manzur, al ser enterado de la movilización, ordenó a su gente que de inmediato interceptaran el autobús y que no las dejaran llegar a Xalapa... el operativo hubiera sido perfecto de no ser por un ligero detalle: Las damas viajaron en ADO, lo que hizo imposible que se detuviera la unidad.

IV
Es posible que cuando se lean estas líneas, las miradas de las cabezas de manada involucradas (Erick Lagos, Javier Duarte, Salvador Manzur) volteen hacia Raúl Zarrabal y lo quieran responsabilizar de estar alborotando el gallinero. Eso es lo más fácil, pero si conocen al “Comas”, saben que se pasa de disciplinado, que es peor que policía de Bermúdez Zurita incapaz de salirse del guión. Lo difícil es que estas cabezas de manada entiendan a la militancia, comprendan su sentir y lo más cabrón: que los tomen en cuenta en una gran decisión que por supuesto, ellos son actores importantes.

V
La mujer recibe una llamada. Identifica el número. Para sus adentros, piensa: “Es la gente del Bembón”. Responde y por el otro lado del auricular, una voz le reclama mientras ella pone el altavoz:
—¿Por qué no asististe a la reunión con Pazos? Si no te alíneas, ¡atente a las consecuencias!
La presidenta de Sección estaba en reunión con gente del CDE del PRI.

V
Apenas el sábado, se habla de una reunión con el delegado del PRI en esa zona y líderes y presidentes de sección de Boca del Río, así como presidentes de los Comités Directivos Municipales de la región, brillando por su ausencia Jorge Reyes Leo... dicen que el cachorro tuvo miedo a los reclaoms y consignas de la militancia boqueña.

En dicha reunión, los presidentes y líderes de sección boqueños externaron al delegado su apoyo total a Raúl Zarrabal como candidato a la alcaldía. Y de paso, hicieron realidad los temores de Reyes Leo: comentaron también su molestia por un PRI boqueño que nunca está abierto... al diálogo y para que los atienda... sí, las oficinas pueden estar abiertas, pero su dirigente, no.

Mientras, Sergio Pazos comía en “Paradise”, restaurante de los Ferrari, en compañía de amigos y gente de Salvador Manzur.

VI
La gente, la raza, la militancia, habla, externa su sentir, sus deseos y sobre todo, su convicción por lo que quieren... y no quieren. Quieren a Zarrabal como candidato a la alcaldía. No quieren a Pazos como candidato a la alcaldía. El único que no ha dicho nada es Raúl “El Comas” Zarrabal y en su silencio puede que asegure dos cosas: 1) alguna candidatura, quizás no la que él quiera y 2) la decepción de la gente que aún cree en él como la mejor opción como candidato por la presidencia municipal de Boca del Río.

Habrá que ver cómo emplea el PRI el capital político de Zarrabal, si para satisfacer un capricho personal o el de conjunto.