Creo que ya se los dije: “vox populi, vox Dei”. La voz del pueblo la hace suya Dios. Y me cae que sí.

 

 A diario leo, escucho o simplemente palpo que en Las Choapas las cosas no están bien y que la gente, tú y yo, y todos, estamos hasta el gorro de que un méndigo roedor nos quiera mangonear.

 

 Ese reflejo lo tenemos todos. Y ahora, lo dicen las encuestas, los sondeos de opinión y la intención de voto. Hay un repudio de poca contra el cacicazgo de Renato Tronco, o el remedo de cacicazgo porque si fuera tan poderoso no habría quien se le pusiera enfrente o quien le levantara la voz.

 

 La encuesta de Presencia tiene lo que los estadísticos exigen: muestras representativas, ciudadanos que opinan libremente, que expresan su sentir en diferentes puntos del municipio y que no sólo indican su preferencia sino que dicen también quién sería el peor de los candidatos a la alcaldía.

 

 La encuesta dice que si hoy fueran las elecciones, Marco Estrada Montiel y Serafín Roldán Serna, uno venido del PRI y ahora en el PRD, y el otro panista, tendrían la alcaldía en la bolsa. En tercer lugar, Miguel Tronco Gómez, el ratoncito de Renato, y muy pegado a él, el ganadero Albino Pérez Calleja.

 

 Estrada y Roldán tienen 28 por ciento de intención de voto; Tronco el 20, y Callejas el 18. Tronco va por el Partido Verde, en alianza con el PRI. Callejas no tiene partido y lo más seguro es que no compita, aunque sus votos son los que van a definir al ganador.

 

 Este ejercicio de opinión ya les quitó el sueño. El repudio está a la vista. La sociedad, como suele decirse, no se equivoca y va expresando el rechazo a un gobierno, el tronquista, al que ve como enemigo de los intereses del pueblo.

 

 Yo lo veo así: la encuesta demuestra la fortaleza del voto ciudadano por un cambio. La sociedad demanda cambios. Ahora se espera que los actores políticos se comporten a la altura de las circunstancias para responder al clamor popular.

 

 Marco Estrada salió bien pese a que todo mundo le criticó que hubiera creído en las promesas del gobernador Javier Duarte, que haya sido un diputado blandengue, que no replicaba nada en el Congreso de Veracruz porque estaba seguro que así se iba ganando la candidatura del PRI. Y qué pasó. Se tuvo que ir al PRD, al que lo levantó porque ni pintaba.

 

 Lo que le falta es ponerse las pilas, dejar su alardes de gran cabrón, mostrar el rostro humilde y dejar de ningunear a sus contrincantes. Para soberbios ya tenemos con el ratón vaquero.

 

 Casi a la par de simpatizantes se encuentra Serafín Roldán. Sin embargo, al descendiente de las llamadas fieras, la familia Roldán, lo posicionó  la propaganda y el trabajo realizado en el gobierno municipal de Antonio Pouchoulén Cárdenas, cuando fue director de Desarrollo Social Municipal.

 

 Ha de estar cañón que tu hermano te cuente un cuento, que te infle como pelota y que el pueblo te diga que nomás no, que no te quiere y que te vayas con tu música a otra parte. Ha de estar pensando eso Miguel Tronco Gómez, tras leer la encuesta de intención de voto en Las Choapas, allá metido en el tercer lugar.

 

 Desde la elección de 2012 y ahora con la encuesta, se sabía de la oposición al cacicazgo. La lectura es clara. A nadie le convence el relumbrón y el oropel, el dinero del erario que usa Renato para impresionar con obras que hace pasar como suyas, de su Unión de Transas 25 de Abril, y otras de dudosa procedencia. El rechazo es total. Y a Miguel sólo lo aceptan en algunas colonias y en algunos ejidos. Pero donde se suponía que tenían control, están bien pelados.

 

 Callejas es harina de otro costal. Ni es candidato pero está en el ánimo de los electores. Su actividad ganadera, su liderazgo, le sirvió como trampolín para posicionarse. Iba bien, pero su tío Juan Nicolás Callejas Arroyo, el dueño del sindicato magisterial, sección 32, lo dejó solo. Prefirió apoyar al hermanito incómodo, Ricardo Calleja, para que sea alcalde de Misantla.

 

 A Albino, vía terceros porque Renato no va a dar su brazo a torcer, le ofrece la sindicatura para que se sume a la candidatura del ratón Miguelito. Sabe Renato que esos votos son clave. Pero si Albino se quiere a sí mismo y aprecia su prestigio, que lo piense, porque aliarse con los Tronco lo único que conseguirá será el rechazo de la sociedad y verlo convertido en un traidor que se vende por una migajas.

 

 La encuesta, como les dije, es reveladora. Le toma el pulso a la sociedad. Mide el rechazo al gobierno represor de Renato. Y le augura una sonora derrota en la próxima elección.

 

 Con esos números, el cacicazgo ya huele a cadáver.

 

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