La vista se no puede mostrar porque supera el umbral de vista de lista (5000 elementos) aplicado por el administrador.

Para ver los elementos, intente seleccionar otra vista o crear una nueva. Si no cuenta con permisos suficientes para crear vistas para esta lista, solicite al administrador que modifique la vista de modo que cumpla con el umbral de vista de lista.

Más información sobre la creación de vistas para listas grandes.

Juan Ciudadano

Los Gobernados

Se fue Nemi, se queda la corrupción

06/10/2014 09:04 a.m.

Y así, literalmente, no dijo ni pío.
Como dicen los del Notiver, el gobernador Javier Duarte de Ochoa echó al secretario Juan Antonio Nemi Dib, pero ni una jota, ni una coma, ni un acento sobre la corrupción en la Secretaría de Salud de Veracruz.

Le dio las gracias a Nemi. Le dijo que qué chingón esfuerzo dio al frente de los servicios de salud. Lo puso allá en la estratosfera, en las nubes, casi en el cielo. Pero de las razones por las que se fue de Sesver, ni mais.

 “Gracias Toño”, le expresó así, de cuates. No se refirió a él como licenciado o como señor Nemi Dib. No, le dijo Toño. Y es que Toño es del círculo duartista, Nemi nacido en Córdoba y el gobernador criado en la ciudad de los 40 Caballeros.

Pero a su cuate Toño le dio cuello.
Puso en su lugar a Fernando Benítez Obeso. Es el nuevo secretario de Salud. Pero poco va a cambiar el sistema de salud en Veracruz.

Nemi enfrentó dos tipos de corrupción: la de la administración y la sindical. Y entre las dos le han dado en la madre a los veracruzanos.

Una de ellas fue la concesión a la empresa Finamed, que viene de la era fidelista. Era la que proveía de medicamentos y rentaba equipos médicos y todo tipo de insumos para la operación de los hospitales del sistema de salud de Veracruz.

Ante el cúmulo de denuncias por fallas en el servicio, Finamed se fue. Entonces Nemi Dib tuvo que dar la cara porque no había medicamento en los hospitales y la gente comenzó a salir a las calles a protestar.

Poco a poco se fue atendiendo la situación. No se corrigió pero cuando menos no se agravó. Nemi capoteó esa parte del problema, la que genera la administración, que termina brindando un servicio deficiente si no es que pésimo. Como pudo, aguantó.

La otra parte fue la corrupción sindical. Y esa fue la que marcó la salida de Juan Antonio Nemi Dib de la Secretaría de Salud.

Nemi denunció a una mafia que encabeza la secretaria general del sindicato de la Secretaría de Salud, Luisa Ángela Soto Maldonado, y su hermano Martín, quien es el poder tras el trono, aunque no trabaja en Sesver.

El Veracruz de Javier Duarte está infestado de corruptitis. En un gobierno en el que todos roban, lo mismo funcionarios de dependencias que líderes de burócratas, el gobernador enmudece y se traga su discurso de “aquí no pasa nada”.

Lo más cañón es que Duarte mandó a la goma a su cuate Toño, pero no dijo ni madres de las denuncias por corrupción de esa mafia sindical, del robo de medicamentos, de los negocios que se hacen con los equipos médicos de los hospitales, del tráfico con las plazas de trabajo, ni prometió limpiar la casa, sanear la Secretaría de Salud o corregir el uso del poder que detentan esos líderes con un área tan sensible y necesaria para la población en general.

Nemi Dib estuvo en Sesver año y medio. De marzo de 2013 a la fecha hizo lo que pudo. Se puso las pilas. Trató de corregir lo que andaba mal. Dio la cara ante múltiples quejas. También calló en hechos de corrupción pues sabía que iba a ser presa de la mafia. Y al final se largó por donde llegó pues pudo constatar que no se puede derrotar al monstruo de mil cabezas que representa la pandilla sindical.

Nemi denunció que la lideresa sindical tenía el control sobre el 50 por ciento de los contratos de trabajo. Nada más en el hospital Materno-Infantil de Boca del Río son unos 400. Pero quería todo el pastel. Dijo que los ofertaba en 100 mil pesos cada uno. O sea, era un negocio de 40 millones de pesos.

En Córdoba, el dirigente sindical falsificaba documentos para poder homologar plazas de trabajo, previo pago de los agremiados. El de Orizaba usaba el 20 por ciento de los espacios físicos de los hospitales para su uso personal y, por supuesto, sus negocios. La de Cosamaloapan endosó un cheque con fondos nacionales para pagar la fiesta de 15 años de su hija. El de Poza Rica está involucrado en falsificación de documentos para cobro de viáticos y en robo de combustible.

Puros chicos recomendables. Y eso se los decía Nemi Dib a la cara.
Nemi Dib enfrentó 91 paros de labores injustificados. Los trabajadores, movidos por sus líderes, se declararon en rebeldía. Los trabajadores con cargo directivo renunciaron a los mismos. Fueron generando un caos porque lo que se veía venir era el fin de los privilegios de la mafia sindical.

Pero mientras él denunciaba la corrupción, el gobernador Javier Duarte se arreglaba con la lideresa. La dejaba libre de culpa. Protegía sus negocios. Solapaba a los líderes menores, que son tan transas como la méndiga lideresa Luisa Ángela Soto Maldonado.

Y al final el hilo se reventó por lo más delgado. Nemi Dib se tuvo que ir. Ya antes intentaron colocarle un funcionario fidelista para que le aplicara marcaje personal. Nemi amenazó con renunciar. Duarte lo sostuvo y, supuestamente, lo iba a fortalecer.

Pero en cuanto Nemi Dib denunció la corrupción del área sindical, el gobernador se arrugó y lo sacrificó.
De la lección de Nemi Dib hay que aprender. La corruptitis va a seguir porque Javier Duarte no se va a confrontar con las mafias sindicales. Las va a solapar.
Nemi se fue y el gobernador no dijo ni pío.

(Comentarios y tips a: [email protected])


¿Te ha parecido interesante la columna?

Comentarios

Comparte
La vista se no puede mostrar porque supera el umbral de vista de lista (5000 elementos) aplicado por el administrador.

Para ver los elementos, intente seleccionar otra vista o crear una nueva. Si no cuenta con permisos suficientes para crear vistas para esta lista, solicite al administrador que modifique la vista de modo que cumpla con el umbral de vista de lista.

Más información sobre la creación de vistas para listas grandes.