¿Ya vieron? Que el gobierno de Veracruz se está haciendo maje, que no investiga la desaparición del periodista Moisés Sánchez Cerezo, que todo es una simulación, que la PGR se hace tonta y no le entra al caso, que no quieren que se diga que es periodista para minimizar el impacto.
 
Ya lo habíamos dicho los periodistas que estamos pendientes del caso de Moy. Hay una parálisis y la policía no hace nada porque los políticos están en otra cosa.
 
Pero ayer que toma vuelo el asunto con Carmen Aristegui, quien entrevistó para Noticias MVS al hijo del periodista, Jorge Sánchez Ordóñez, y al director del Organismo No Gubernamental Artículo 19, Darío Ramírez.
 
Ellos dijeron unas cuantas verdades. Fueron contundentes en lo de la falta de investigación por parte de la policía de Veracruz y los dos señalaron que existe una simulación.
 
Se le fueron encima al gobernador Javier Duarte y denunciaron que existe la intención de no hacer nada por esclarecer otras desapariciones y muertes de periodistas.
 
El espacio de Carmen Aristegui es de lo más preciado. Ahí se tocan asuntos de gran relevancia y se atrae la atención de los sectores más poderosos del país. Lo ven y escuchan políticos, empresarios, líderes sindicales, abogados, defensores de derechos humanos y, sobre todo, el pueblo.
 
Carmen Aristegui es influyente y respetada por los temas que maneja y por darle voz a gente que necesita hablar y que sufre el atropello y la injusticia.
 
Muchos somos habituales radioescuchas de Carmen Aristegui. Ahí hemos escuchado el caso de los 43 de Ayotzinapa, la casa blanca de La Gaviota, la detención y juicio de Elba Esther Gordillo, los “moches” de los panistas para darle obra a los alcaldes del PAN, el pleito entre los Yunes y Fidel Herrera, la casita de Javier Duarte en Estados Unidos, el juicio al empresario Pancho Colorado por lavar dinero para los Zetas, y así muchos temas más.
 
Carmen Aristegui le dio cabida al caso de Regina Martínez, la corresponsal de Proceso en Veracruz, asesinada en su domicilio, sin que hasta la fecha se halla encontrado al autor material, y al de Gregorio Jiménez de la Cruz, reportero de Notisur y Liberal, a quien secuestraron en su casa de Villa Allende y lo asesinaron para después sepultarlo en una fosa clandestina.
 
Carmen Aristegui le da voz a todos los involucrados. Le permite a la gente que no encuentra espacios, hablar de la injusticia que sufren. Abre los micrófonos para que se sepa lo que el gobierno censura a través de sus convenios de publicidad con muchos medios nacionales, Televisa, TV Azteca, Milenio, El Universal, entre otros.
 
Por eso, aunque por breve tiempo, el hijo de Moy y el director de Artículo 19 hablaron del caso y reiteraron que el gobierno de Veracruz está simulando, que no busca al periodista y que no sigue las pistas para determinar la responsabilidad del alcalde de Medellín de Bravo, Omar Cruz Reyes, quien amenazó a Moy con darle un susto por las críticas que le hacía y por hablar de la violencia en aquel municipio.
 
El caso es una bomba. Dice el director de Artículo 19 que tuvo acceso al expediente del caso y que no encontró indicios de investigación, que sólo hay relatos pero que no se ve qué ha hecho el Ejército o qué acciones toma la policía. O sea, no hay evidencia de que el gobierno de Javier Duarte busque al periodista Moisés Sánchez.
 
Es una desgraciadez. En más de dos semanas desde que Moisés Sánchez fue secuestrado por tipos desconocidos, el gobierno de Veracruz no ha hecho nada.
 
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, dijo el hijo de Moisés Sánchez, instruyó a las autoridades veracruzanas a actuar y a mantener informada a la familia, pero ellos saben del caso por lo que se publica en los medios de comunicación.
 
La Procuraduría General de la República no atrae el caso para no molestar a las autoridades veracruzanas.
 
Darío Ramírez, director de Artículo 19 en México, dijo que esa mañana tuvieron una plática con el representante de Naciones Unidas en temas de derechos humanos y que el caso de Moy ya fue reportado a Ginebra, Suiza, sede de la organización, para que sea evaluado pues en febrero se dictaminará si el gobierno de México incurre en omisión sobre desapariciones forzadas.
 
Qué bueno que Carmen Aristegui le haya abierto lo micrófonos al hijo de Moy y a Artículo 19. Ya muchos medios nacionales lo venían haciendo, pero es necesario que el silencio oficial y la falta de interés no condenen el caso al olvido.
 
(Comentarios y tips a: [email protected])