No lo sabe. O quizá sí, pero ya se le olvidó. Puede que sea eso. Pero en un líder con sus años, con su experiencia, con su colmillo, resulta imperdonable que haya intentado dar un golpe de estado y se le haya salido de control la situación. Y es que si no tiene a las bases de su lado, ya valió.
 
Eso es lo que le pasa a profe Callejas. Quiso imponer a su gente en el área magisterial de Las Choapas y que se arma la revuelta. Se le enfrentan y le echan en cara que así no, que así se va a joder, que así se va a enfrentar a todo un gremio que no está dispuesto a aceptarle todas al cacique, cancelando la vía de la negociación.
 
Puff y recontra puff.
 
Juan Nicolás Callejas Arroyo, el célebre maestro que gobierna al magisterio en Veracruz, que le da sus sapes al que se pone pendejo, que reprime por la vía laboral al insurrecto, vino a dar las nachas en Las Choapas.
 
Envió a la maestra Silvia García Ávalos y la nombró coordinadora del sector sindical. Pero la envió solita, sin que la acuerpara la dirigencia de la sección 32 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, y ¡cataplum!, que la batean.
 
Lo primero que dijeron los maestros inconformes, es que Silvia García Ávalos ni siquiera trabaja en Las Choapas y, además, no los tomaron en cuenta, no consensaron, se pasaron de lanzas y los ignoraron. Y eso nomás no.
 
El asunto se cocinó en lo “oscurito”, como hacen siempre que se trata de ponerle un pie encima a los demás. La maestra Silvia llegó y se encerró en salón de los jubilados petroleros. Ahí hicieron el tamal y ya se lo estaban comiendo cuando llegaron los secretarios generales de las diferentes áreas del SNTE choapense. Exigieron entrar y le descompusieron el cuadro a la maestra.
 
Lo menos que dijeron es que esta es otra imposición de Callejas pero ya se jodió porque no se la aceptan. Le echaron en cara que así no es, que así no se hacen las cosas y que ellos, que son quienes tienen a las bases de su lado, no aceptan a la profe Silvia García Ávalos y que ellos siguen reconociendo al maestro Fernando Girón Salas como su coordinador.
 
Y que se sueltan con su “¡Zapata Vive, la lucha sigue!, ¡Zapata vive, la lucha sigue!", ¡Zapata vive, vive, vive, la lucha sigue, sigue, sigue!”. Bien zapatistas los profes, obviamente de izquierda y algunos en la línea de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la CNTE.
 
Los callejistas lo único que hacían era grabar con sus teléfonos celulares, como si con eso fueran a inhibir la inconformidad. Grababan como diciendo: le voy a llevar las pruebas de que te pones rejego a Callejas, y Callejas te va chingar.
 
Lo que hay que ver, carajo. Maestros antidemocráticos tratando de amedrentar a maestros que eligen a sus representantes. Y ahí estaba la maestra Karina Izquierdo Huerta, secretaria general del PRI, que no representa más que los intereses de un grupo minoritario.
 
¿Que le van a bajar? ¿Que los van a doblegar? No manchen si al día siguiente el maestro Fernando Girón Salas habló y no dejó títere con cabeza: Yo sigo siendo el coordinador político sindical. Y les soltó una sarta de verdades que han de haber retumbado en la sede del poder de Juan Nicolás Callejas, en Xalapa.
 
Girón Salas dice que ahí, en Las Choapas, las cosas no son como en otras partes. En Las Choapas se respeta a las bases, se les escucha, se les toma en cuenta, se les permite elegir a sus representantes.
 
Ahí, las imposiciones no funcionan. Por muy cacique que sea Callejas, o consensa y respeta la decisión de las mayorías o ya se fregó.
 
Girón Salas le sacó que detrás de estos intentos de golpe de estado, lo que hay es la debilidad del PRI. Los dirigentes priistas de Las Choapas, entre ellos la maestra Karina Izquierdo, no representan nada.
 
“El representante del PRI en el país Enrique Peña Nieto la ha calabaceado, la ha regado y de sus reformas no vemos resultado por ningún lado, al contrario, ahorita en esta etapa lo que necesitan es que el PRI tenga diputados federales para poder seguir haciendo lo que saben hacer: traicionar al país, necesitan una campaña”, dijo.
 
¡Újule! Grueso. Cuando alguien dice que el presidente priista “la ha calabaceado”, es que el control ya se perdió. Callejas no manda, Callejas es un cacique en decadencia, y el magisterio se le cae a pedazos a menos de dos meses de la elección para renovar la Cámara de Diputados.
 
Miren nomás. Lo que deja a flote un conflicto magisterial y una fallida imposición.
 
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