Gonzalo Guízar no es querido. Mejor dicho, es odiado. No lo quieren por lo que hace hacen sus hermanos, porque despojan a la gente, porque roban terrenos, porque violan la ley. Y a Gonzalo no lo pasan por eso ni se la perdonan porque siempre los encubre. Y lo peor para nosotros es que, nos guste o no, lo vamos a ver en la Cámara de Diputados.
 
Sí, güey. Está puta cabrón la cosa. Gonzalo Guízar hace campaña para diputado federal por Coatzacoalcos y al mismo tiempo es candidato a diputado federal por la vía plurinominal. Y ocupa un lugar de privilegio en la lista del Partido Encuentro Social, el número uno. O sea, gane o pierda, ya ganó.
 
A ver, se las cuento otra vez. Guízar preside el PES estatal. Al mismo tiempo es candidato a diputado federal por Coatza. Y al mismo tiempo encabeza la lista de candidatos pluris por la tercera circunscripción, o sea donde va Veracruz.
 
Y como les digo, aún perdiendo en la elección del 7 de junio, va a estar en la Cámara de Diputados simplemente porque con los pocos votos que pueda obtener el Partido Encuentro Social, le sobra para llegar al Congreso federal.
 
Qué ondas tan truculentas tiene nuestra democracia, si es que a esto se le puede llamar democracia.
 
Un político puede ser candidato a diputado de mayoría y también a candidato de representación proporcional. O sea, puede jugar para ser diputado uninominal y también diputado plurinominal.
 
Uta, pa’ mis pulgas. Y a este sancochado político le llaman democracia.
 
De entrada está cañón. El pueblo, nosotros, no queremos diputados de más. Los pluris son una carga para el país, que cuestan una barbaridad de millones. Son 200 políticos que llegan al Congreso sin hacer campaña, nada más porque a cada partido se le asigna un número de diputados de acuerdo con el porcentaje de la votación total obtenida el día de los comicios.
 
Los otros 300 corresponden a los distritos electorales del país. Esos sí son electos por los ciudadanos. Son los que hacen campaña, los que van de casa en casa y de colonia en colonia pidiéndole el voto a la ciudadanía.
 
Pero los pluris son la hueva. Llegan sin mayor esfuerzo. La mayoría son los cuates de los dirigentes de los partidos, los recomendados de los políticos en el gobierno y uno que otro es gente brillante, especialistas en determinados temas de interés nacional.
 
Cada partido político hace su lista, una por cada circunscripción electoral. Son cinco circunscripciones en las que se reparten los 31 estados de la República y el Distrito Federal. En cada lista aparecen los candidatos pluris, algo así como 22 personajes.
 
En el caso del PRI, PAN y PRD, pasan los que ocupan los lugares del 8 al 10 de cada lista, dependiendo de la votación obtenida. A otros partidos le tocan menos. Pero entre todos suman los 200 pluris.
 
El caso de Gonzalo Guízar refleja la comodidad con que se puede llegar al Congreso y disfrutar de los beneficios políticos y económicos que representa ser diputado.
 
Gonzalo contiende por la diputación en el distrito de Coatzacoalcos y al mismo tiempo es número uno en la lista pluri del Partido Encuentro Social en la tercera circunscripción. Puede perder la elección y aún así será diputado.
 
Esas son las cosas que tiene la política. El compromiso de Gonzalo es acarrearle votos al PES. Pero esa es otra falsedad. Gonzalo Guízar sólo tiene presencia en Coatzacoalcos. Fuera de ahí, de ese distrito, lo más seguro es que al PES se lo lleve la corriente.
 
Si no obtiene los votos suficientes, lo más seguro es que el PES no logre mantener su registro como partido político y perdería sus prerrogativas económicas, que es la base para que los partidos pequeños sobrevivan.
 
El PES, como todos, debe superar el 3 por ciento de la votación nacional. Así mantendría el registro y podría colocar algunos diputados pluris y uno que otro de mayoría.
 
Algunos dicen que Gonzalo Guízar puede ganar en Coatzacoalcos. Yo lo veo difícil. Si tuviera todas las canicas en su costal, no tendría por qué haber aceptado ser candidato pluri. Está asegurando su ingreso a la Cámara de Diputados aunque sea por la puerta trasera.
 
Así de jodida está la política en México. Algunos ganan perdiendo.
 
(Comentarios y tips a: [email protected])