* El Cisne: la imposición puede esperar  * Duarte y sus desvaríos  * Yunes Linares, feliz  * El exilio de Fidel  * Nataly y Palacios, tras el cargo de Jesús Moreno  * Lu-pilla usa el logo del DIF  * El Tomate y la chica de Acción Social  * Tony Macías, Interacciones y Lemarroy  * Negocios de duartistas y yunistas azules

 

Imponga o no a “El Cisne” Silva Ramos, lo encarte o lo descarte, Javier Duarte sigue en su titánica labor de socavar al PRI. Provoca rupturas y alienta enconos, más por el desaseo con que actúa que por su terquedad.

 

No concibe el gobernador que el duartismo apesta. Se despeñó cuando el saqueo a las arcas, el caos financiero, la corrupción y la complicidad con los ladrones, la violencia brutal hicieron de su gobierno el sello de lo que un priísta puede lograr con el poder.

El episodio del Cisne es revelador. Exhibe a un gobernador caído en desgracia, alejado de todos, olvidado por los suyos, que echa mano del peor ejemplar para sabotear la candidatura a gobernador.

Quiere a Alberto Silva Ramos en la presidencia del PRI estatal, sin méritos ni logros, repudiado por un amplio sector del priísmo, por los tuxpeños a los que gobernó, A exceopción de sus bases fanáticas que a la primera provocación mostraban las lanzas y alzaban la voz en gritos de venganza contra los adversarios del descuadrado Cisne.

Quiso imponerlo en el consejo político estatal del PRI, el domingo 18, pero la reacción adversa lo frenó.

Replicaron los Yunes rojos. Desdeñaron el cambio en la dirigencia. Reclamaron el albazo, pero al final cedieron.

Otros dirigentes y líuderes de corrientes priístas señalaron que no son las formas para realizar el relevo. Amagaron con boticotear el consejo político estatal del PRI.
Duarte también debió recular. Aplaza la imposición de Silva Ramos una semana. No será el domingo 18, sino el domingo 25. Pero lo impondrá.

 

Hay reacciones que advierten el costo que tendrá que el duartismo siga mandando en el PRI, el mensaje al electorado, la lectura de que un voto por el PRI es un voto por un gobierno que acabó con las finanzas de Veracruz, que dejó pasar al crimen organizado y que saqueó las arcas sin piedad.

Entre algunas de las reacciones que ha provocado la sacudida provocada por el empecinamiento de Javier Duarte por imponer a su delfín, Alberto Silva Ramos, está la del columnista Arturo Reyes Isidoro, en su Prosa Aprisa.

 

Sostiene que esta partida política la ganó el gobernador. Pidió el relevo en el PRI estatal, se lo concedieron, lo manjó sin prudencia, logró el repudio de los senadores Yunes landa y Yunes Zorrilla, pero al final se salió con la suya.

 

“A lo mejor él y Silva se precipitaron —dice Reyes Isidoro— y cometieron un error al no guardar las formas al dar la noticia el lunes, por lo que, en efecto, el Consejo Político que había anunciado el tuxpeño para el próximo domingo no se realizará, pero sí se espera que tenga lugar el domingo 25 en tanto se cumplen las formas y la normatividad partidista, y lo que siguió ayer demuestra que Duarte hizo valer su derecho como gobernador a imponer al dirigente, pero, más importante que eso, que el presidente Peña Nieto, que es el líder natural de su partido –el formal lo es Manlio Fabio Beltrones–, lo respaldó.

 

“Esto –de paso lo comento– empata con una versión que me dieron y que se manejó en la ciudad de México en el sentido de que en su momento, ante los problemas que enfrenta el estado, el Secretario de Gobernación, Osorio Chong, le planteó a Peña la necesidad de invitar a la administración federal al cordobés, pero que el mexiquense le dijo que no, que lo dejara en su cargo a menos que le diera alguna otra indicación. De ser cierta la versión, no sólo han decidido mantenerlo sino que le han reiterado el apoyo dándole el visto bueno a su propuesta para que Silva llegue al PRI estatal. 

 

“Ayer comentaba también que se trata de una lucha por el poder y no es ningún secreto que hay fuerzas políticas polarizadas: por un lado Duarte y su grupo en el poder y por el otro los senadores José Francisco “Pepe” Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa. Uno a mantenerlo a toda costa, los otros a que haya cambio de equipo desde el manager o entrenador pasando por los jugadores hasta el último aguador”. 

 

Más adelante señala Reyes Isidoro:
“Decía yo ayer que el tema es de los priistas, pero que tiene alcances en toda la sociedad por cuanto que Silva Ramos representa el continuismo del fidelismo-duartismo, lo que podría poner a los veracruzanos ante la posibilidad real de una prolongación de los dos gobiernos inmediatos anteriores, con todo lo que ello pueda traer como consecuencia. Ayer por la tarde, ya con la confirmación del arribo al PRI del tuxpeño, escuché de varias personas ajenas al PRI su preocupación. Están escamadas y temen que las cosas no mejoren.

 

“Pero en los gobiernos federal y estatal eso pareciera no interesarles, ni preocuparles las consecuencias que pudiera haber entre el electorado. Ya se ve, están dispuestos a seguir adelante y se ve que no van a parar por nada ni ante nada. En adelante, si las cosas siguen como van, sólo los ciudadanos electores tendrán la última palabra”.

 

Manuel Rosete, director del portal Formato 7 y Autor de la columna Apuntes, refiere el albazo para imponer a Silva Ramos en la presidencia del PRI estatal y los costos que tendrá para Javier Duarte:
“Lo grave de este asunto es que se nota que el gobierno no entiende que vivimos en un federalismo, que es el sistema político en el que el poder se reparte entre un estado central y sus diferentes partes federadas; en este sistema, los estados permanecen sometidos, siempre, a las decisiones del centro. Y como no lo entienden piensan que de todo lo que hacen y dicen el gobierno central no se entera y, por lo tanto, no tiene consecuencias, cuando es todo lo contrario.

 

“Todo parece indicar que el estado hizo un nuevo ridículo, como el intento de desafuero del alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez, como la denuncia penal interpuesta ante la PGR en contra de Yunes Linares, como tantas y tantas cosas más absurdas que reflejan falta de oficio político y un acentuado espíritu de patrimonialismo en su equivocado ejercicio del poder”.

El PRI se cae a pedazos. Un duartista en la dirigencia estatal equivale a darle voto al continuismo, a refrendar el proyecto —si es que a eso se le puede llamar proyecto— de Javier Duarte.

Entre todo, hay actores políticos que gozan ante el desgra¡namiento del PRI. Uno de ellos, Miguel Ángel Yunes Linares, aspirante declarado, casi seguro candidato del PAN a la gubernatura de Veracruz.
Gracias a Javier Duarte, el PRI camina hacia la derrota.

 

Exilio político, quiérase o no, al que es confinado Fidel Herrera Beltrán. Asume el consulado en Barcelona, el lunes 19, luego que se le ubicara en embajadas de América y Europa, en Argentina, en Venezuela, en Grecia. No le toca una embajada al ex gobernador de Veracruz, autor del circo que hoy enfrentan los veracruzanos por su ocurrencia, mala leche, ambición desmedida, pues el nativo de Nopaltepec quería seguir gobernando vía su hijo político, Javier Duarte, el Señor de los Cheetos y el Xbox. Despedazado por su deplorable fama, se va al consulado de Barcelona, no a sustituir a nadie pues el cargo estaba acéfalo y, por lo que se sabe, ni quién pujara por ocuparlo. O sea, sopita de tortilla para don Fidel, hoy más alejado que nunca de la “plenitud del pinche poder”…

 

Se agita el DIF. Trasciende la salida de Jesús Moreno Delgado y ya hay visos de rapiña y asaltos al poder. Los suyos, los chuchistas, dicen que su relevo debiera ser Manuel García Palacios, actual subdirector; otros ya ven en la dirección del DIF municipal a la actual titular del área educativa, Nataly Reyna Toledo. La guerra es sorda. Hablan y grillan los de abajo como si su opinión contara. Fustigan a Nataly pues dicen que de aquella joven que en la campaña joaquinista era todo amor, solidaria con la tropa, queda poco. Viene de una prueba de fuego: la campaña de Rafael García Bringas a la diptuación federal por Coatzacoalcos. Le tocó operar en la colonia Héroe de Nacozari, con propaganda y recursos, lo que requiriera. La derrota fue total. No hay certeza de que Jesús Moreno renuncie al DIF, pero su gente ya se despedaza por el cargo que aún ostenta…

 

Viene de un plagio la Fundación Theurel y ahí está el arrebato de Lu-pilla Félix. En su campaña adelantada para ser candidata a diputada local por Coatzacoalcos, la señora Theurel ostenta el corazón estilizado que usó en sus días al frente del DIF municipal. Es el sello de la casa. Es el modus operandi. Se apropian de todo, como lo hicieran durante la alcaldía que le tocó encabezar a Marcos Theurel…

 

Y cómo no iba a ser. Si el titular de Acción Social municipal, Sergio Rodríguez, no se aplica, si se le van los errores ortográficos en las mamparas, si aparece “Proyecto Vasconselos” en relación al célebre educador mexicano José Vasconcelos en una fotografía que tiene alta difusión, y si le llueve metralla, es por algo. Y ese algo es que el tal Sergio Rodríguez, alias “El Tomate”, no está en lo que está. Y tiene que ver con su nueva estrella, una joven veinteañera que trae de cabeza a todo el personal de Acción Social, agraciada y coquetona. De ahí la desatención y las pifias…

 

A ver. El 26 de noviembre de 2013, Banco Interacciones representado por Tony Macías, y Parque Tecnológico Puerto México, representado también por Tony Macías, realizaron la venta de una fracción del predio que hoy detenta el suegro incómodo del gobernador Javier Duarte, a la empresa Servicios Promos, S.A. de C.V. Según el contenido de la escritura pública 1,931, elaborada por el notario Alfredo Herrera Cantillo, el señor Macías representó tanto a su pseudoparque tecnológico como a Banco Interacciones, y Promos fue representado por Jacinto Rafael Lemarroy González. Pudiera tratarse de una operación sin mayor relevancia, pero no es frecuente ver cómo un duartista, Tony Macías, hace tratos con un yunista azul, Jacinto Lemarroy. O sea, en política se despedazan y en los negocios se complementan. Súper…

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