A ver. A uno lo estaban cazando, lo encontraron en su casa y lo mataron. Al otro lo hieren en medio de una balacera, en Coatzacoalcos. Los dos son hijos de la maestra Rosario Rojas Aragón, del Movimiento Magisterial Popular Veracruzano.

Lo de este lunes 19 no tiene las trazas de ser un incidente menor, sobre todo porque no se habla del ataque de una banda de forajidos contra dos inocentes sino de una balacera entre grupos armados.

Les recuerdo el primer caso. Es el de Miguel Ángel Castillo Rojas, ejecutado casi en la puerta de su casa.

Aquello ocurrió el 5 de abril, en la colonia La Sabana, hasta donde llegaron los sicarios y abrieron fuego contra Miguel Ángel, dejándolo tendido en el piso, en medio de un charco de sangre, sin vida.

El asunto tomó vuelo porque algunos captaron los hechos en video y los subieron a las redes sociales, mostrando el drama de una familia al ver a Miguel Ángel muerto. Se ve el reclamo de su madre a los que se acercan y los gritos de dolor de otras personas.

Entonces muchos expresaron que era un acto de represión a la maestra Rosario Rojas por su activismo en el Movimiento Magisterial Popular Veracruzano, que en esos días arreciaba sus protestas por la evaluación del personal docente, calificándolo como una trampa del gobierno para deshacerse de la disidencia que pide la derogación de esa tan cuestionada reforma estructural del presidente Enrique Peña Miento.

Hubo voces que, sin embargo, advertían que la ejecución de Miguel Ángel Castillo Rojas era algo distinto, que nada tenía que ver con el conflicto magisterial.

Cinco meses después hay otro hecho de sangre que involucra al otro hijo de la maestra Rosario Rojas, de nombre Moisés, y ahora se habla de un enfrentamiento entre grupos armados. Eso es extremadamente delicado.

Todos los medios con páginas en internet están tocando el tema. Todos traen a cuentas que Miguel Ángel Castillo Rojas fue acribillado el 5 de abril. Todos dicen ahora que lo de Moisés es parte de la violencia entre bandas del crimen organizado.

Recordemos que Moisés fue quien salió a tratar de alcanzar a los asesinos de su hermano Miguel Ángel, sin lograrlo, y recibió algunos tiros que lo mantuvieron en estado delicado.

Esta mañana de lunes nadie imaginaba que su nombre volvería a ser mencionado en un hecho de violencia y sangre.

Según el reporte policíaco, esto ocurrió a las 17:25 horas, sobre la avenida Universidad, frente a Plaza Dorada, por un lado, y frente a la colonia Teresa Morales de Delgado, por el otro.

Una de las versiones difundidas habla de un enfrentamiento a balazos, que hubo disparos de ambos lados, que se persiguieron y finalmente uno de los autos se le cerró al otro y ahí comenzó el fuego.

Moisés Castillo habría recibido dos impactos en el cuerpo y un rozón en la cabeza. Su acompañante, Irving de Jesús Islas, de 21 años de edad, sólo un rozón en la oreja. Una versión sostiene que ambos habrían abordado un taxi y así llegaron hasta una farmacia en la colonia El Tesoro, donde un paramédico los atendió y dio aviso a la Cruz Roja.

La otra versión asegura que Moisés e Irving fueron perseguidos e interceptados hasta que les cerraron el paso y les golpearon el vehículo y que la intención era secuestrarlos pero que ellos repelieron la agresión. Ante eso, los sicarios abordaron otro vehículo que los acompañaba y se fugaron.

Minutos después llegaron las patrullas de policía y acordonaron el área para que los elementos de Servicios Periciales y los agentes ministeriales comenzaran a realizar su trabajo tratando de hallar huellas. Sobre el piso se podían observar los casquillos de las balas disparadas.

Como siempre, unos dirán que los heridos son verdugos y otros que son víctimas. Se habla de que fue un choque entre bandas de la delincuencia organizada. Se menciona que Moisés e Irving serían secuestrados y en el peor de los casos ejecutados, pero que los atacantes son gente sin experiencia, improvisados en el mundo del crimen.

Ya se verá en las investigaciones y en las próximas horas se sabrá cuál de las dos versiones prevalece.

Difícil trance para la maestra Rosario Rojas Aragón: en abril le mataron a Miguel Ángel y ahora está herido Moisés, sin saber en qué terminará este nuevo episodio de violencia en el sur de Veracruz.

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