​Este Caballero es otro Javier Duarte y el Perderé, partidazo que ahora es azul, antes rojo y de vez en cuando amarillo diarrea, exige que le intervengan la tesorería municipal de Coatzacoalcos para esclarecer cuánto billete se ha robado.

Las garras, pues, ya las afilaron los hombres de negro —y amarillo— pidiendo un cadalso, una guillotina, una navaja bien afilada para ver rodar la cabeza del alcalde de Coatza, el nunca bien ponderado y mil veces criticado Joaquín Caballero Rosiñol.

Al grito de caigan las ratas, Raúl Vértiz Hernández, líder del PRD en Coatza (o lo que queda de ese partido), convocó a sus seguidores, a la prensa, a los curiosos y hasta a los morbosos y ha pedido que ya, no después, se le esculquen hasta los bolsillos y los zapatos al alcalde para saber qué hizo con los un mil 200 millones de pesos que cada año ejerce como presupuesto.

Anuncia que solicitará al Congreso estatal que intervenga la Tesorería del ayuntamiento de Coatzacoalcos y que se determine el grado de responsabilidad que tienen Caballero Rosiñol y sus amigochos que con él asaltaron el poder y se están yendo con la cochina al monte.

Vértiz, quien es un talento no descubierto aún, así haya pasado por una regiduría municipal, ha tenido el buen cuidado de distinguir entre lo que es el oro y lo que es el oropel, lo que es diamante y lo que es un trozo de vidrio. Y así acusa que una cosa es que Caballero gestione el pago de 160 millones de pesos de participaciones federales que retuvo el gobierno duartista y otra los un mil 200 millones anuales que no se sabe en qué se usaron.

Reproduzco sus palabras para que vean que no es choro mío:

“Ya estamos al final del ejercicio y yo me pregunto ¿hemos visto obra pública? ¿Acaso con 160 millones de pesos va a resolver el problema de infraestructura y además las obras que haya anunciado con ese dinero no va a resolver el problema que tiene Coatzacoalcos?Paulatinamente se han ido gastando el presupuesto, los mil 200 millones que nos corresponden como municipio. ¿Dónde ha ingresado ese dinero? ¿Acaso tenemos otro Duarte en Coatzacoalcos?”.

¡Cataplum! Otro Javier Duarte en Coatzacoalcos. Eso dijo don Raúl Vértiz, líder del Perderé.

Me quito el sombrero. Ya lo definió como lo que es: una réplica del gobernador con licencia de Veracruz, prófugo de la justicia, al que veneraron los priistas hasta el 12 de octubre y al que hasta ellos, los priistas, gritan que debe ir a la cárcel. Lo que es la méndiga desmemoria.

Pues los del PRD andan en esa tarea, titánica diría yo, de que el Congreso que acaba de iniciar funciones, que promete ir al fondo de la corrupción, intervenga la Tesorería municipal de Coatza porque ahí, seguro, seguro, hay desvío de recursos públicos.

Vértiz acusa a Caballero y a los regidores municipales de hacerse güeyes con la retención de recursos de origen federal , ya que esa irregularidad por parte del gobierno del Javidú comenzó en el 2014 y apenas ahora, cuando faltan siete semanas para terminar el 2016, se hacen los engañados.

Otro de los que tomó la palabra y partió en mil cachitos a Joaquín Caballero, fue el líder de la UGOCEM local, Mario Clairgue Viveros, quien se mueve en el ámbito del transporte público.

Clairgue dice que al alcalde de Coatzacoalcos se le debe investigar por todas sus corruptelas, a menos que denuncie, y sobre todo revele, las raterías y desvíos de recursos por parte de Javier Duarte de Ochoa, el mentado Javidú.

El dirigente transportista recordó aquel episodio cuando Joaquín Caballero se negó a recibir al gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares, bajo el argumento de que él era empleado de Javidú y Javidú se podía enchilar.

Partiendo de esa base, si Caballero le tenía miedo a Javier Duarte, es obvio que ahí hay corrupción y que no contradecía al ex gobernador por temor a que de un putazo lo pusiera en la cárcel.

Esto dice Mario Clairgue:

“Joaquín Caballero se tiene que ir a la cárcel; este alcalde tuvo mucho que ver. Aquí hay daños colaterales. Al sector transporte se le afectó porque este señor desvió también recursos, no los exigió y tenemos calles dañadas. Se abandonó la infraestructura. Entonces tiene que ser investigado. O el alcalde denuncia todo lo que hizo Duarte o tendrá que ser denunciado él mismo porque hay un daño total en Coatzacoalcos”.

Y agregó que las protestas de los alcaldes priistas en la ciudad de México es choro y teatro, una mentecata simulación para que les crean que ellos también están contra Javidú cuando que en realidad Javidú a todos los dejó robar y a todos los tiene agarrados.

Por lo pronto, que le intervengan la tesorería a Joaquín Caballero para saber qué tanto se robó.

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