La vista se no puede mostrar porque supera el umbral de vista de lista (5000 elementos) aplicado por el administrador.

Para ver los elementos, intente seleccionar otra vista o crear una nueva. Si no cuenta con permisos suficientes para crear vistas para esta lista, solicite al administrador que modifique la vista de modo que cumpla con el umbral de vista de lista.

Más información sobre la creación de vistas para listas grandes.

Mussio Cárdenas Arellano

Informe Rojo

Mota y el caso de pederastia

06/12/2010 10:54 a.m.
* Desastrosa toma de posesión de Karime de Duarte en el DIF * Para Iván Hillman no hubo butaca * Sánchez Abreu peleando por una silla * Marcos, el católico, en eventos de protestantes * Miserables salarios para operadores priístas * Periodista que se encueró frente al Hospital Regional

Nadie en su sano juicio podría apostar por la solvencia moral de Adolfo Mota Hernández, hoy encumbrado a la cúspide política y convertido por la mano benefactora del gobernador Javier Duarte de Ochoa en secretario de Educación de Veracruz.
 
Mota —Motita para los amigos— tiene un historial digno de toda suspicacia y una trayectoria vertiginosa que en diez años lo ha hecho víctima del vértigo que provoca moverse en las alturas cuando se carece de solidez emocional.
 
Quizá prematuramente se inició la proyección de Motita y ello le ha endilgado una imagen de joven inexperto, carente de carisma, rostro de ingenuo y negado a la inteligencia.
 
De imitador de Fidel Herrera Beltrán no lo bajaban los diputados que integraron la LX Legislatura Federal, de 2006 a 2009, cuando lo veían tomar la palabra desde su curul en el recinto de San Lázaro; gesticulaba como Fidel; entonaba la voz como Fidel.
 
Motita fue ya diputado local, líder del Frente Juvenil Revolucionario en Veracruz, secretario general y presidente del PRI estatal. Pasó por la Cámara de Diputados sin pena ni gloria y ahora es, como ya se ha apuntado, secretario de Educación.
 
Hay voces que aseguran que el cargo se lo debe a Carlos Brito Gómez, quien lo ha categorizado como el último de sus hijos políticos. Hay quien asegura que llegó al gabinetazo de Duarte como parte del apropiamiento de espacios que desarrolla el ex gobernador Miguel Alemán Velasco en Veracruz.
 
Sea como sea, hay episodios en la vida política de Adolfo Mota que distinguen a un político como todos, con más defectos que virtudes.
 
Lo recuerdan en el PRI estatal cuando usaba un privado de un bar contiguo a la sede priísta, en Xalapa, donde trababa acuerdos, y donde años después tres diputados locales —una dama entre ellos— y el doctor Duarte se corrieron tremenda parranda donde salieron a relucir sus verdaderas personalidades.
 
Pero existe otro episodio que es más comprometedor aún para el joven Motita. Y peor cuando don Adolfo se ha convertido en secretario de Educación en el gabinetazo de Duarte.
 
Ocurrió en octubre de 2009, en el Jardín de Niños Experimental Anexo a la Benemérita Normal Veracruzana, donde un menor de edad fue objeto de abuso erótico sexual por parte del señor Oscar Martínez Ríos, quien se desempeña como conserje o intendente del kinder.
 
Al observar una conducta extraña en su hijo, los padres del menor externaron preocupación y finalmente tuvieron en sus manos la información que luego llevarían al Ministerio Público para proceder penalmente. Se acreditó con la versión del niño lo que había ocurrido y se encausó jurídicamente.
 
Lo que vivieron después fue una terrible experiencia en la que afloró el tráfico de influencias, del que señalan al hoy secretario de Educación, Adolfo Mota Hernández. Su esposa, Beatriz Palacios Guzmán, era la maestra del menor y terminó siendo complaciente, al igual que el personal de ese jardín de niños, con el conserje señalado de abuso erótico sexual.
 
La mano de Motita no se limitó a torcer el caso en una primera instancia. Al acusado se le dictó auto de libertad y dos meses después de el Tribunal Superior de justicia de Veracruz confirmó el auto de libertad, con lo cual el agravio a ese menor quedó impune. Mota, según se supo entre los familiares del menor, influyó en la decisión del magistrado que tuvo el caso en sus manos: Alberto Sosa Hernández, quien hoy es presidente del Tribunal Superior de Justicia.
 
Hay, pues, sobradas razones para dudar de la conducta moral del secretario de Educación. Adolfo Mota es producto de un sistema político que miente con descaro, que encubre con cinismo, que pulveriza los valores de la sociedad.
 
En manos de Motita estará por seis años la educación en Veracruz, como en sus manos estuvo el castigo a un hombre acusado de abuso sexual erótico y que gracias a la mano de la complicidad, goza de impunidad.
Vamos bien.

Archivo muerto

Desastrosa organización en la toma de posesión de Karime Macías como nueva presidenta del sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en Veracruz, ayer en Coatzacoalcos. Algún genio propició la movilización de cientos de personas que abarrotaron el Teatro de la Ciudad, que dispusieron de los sitios reservados para los invitados a la ceremonia. Diputados, alcaldes electos, funcionarios de gobierno y hasta familiares de la nueva soberana se acomodaron donde pudieron en el atiborrado recinto. La prensa fue tratada con la punta del pie. Se les confinó en áreas reservadas pero se les impidió trasladarse libremente para captar los mejores ángulos. Semejante burrada alcanzó hasta a los fotógrafos del gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa. También hubo trafique de gafetes de prensa, los cuales terminaron colgados del cuello de personas desconocidas en los medios de comunicación, mientras un reportero de Telever tuvo que ingeniárselas para realizar su trabajo. Ojalá la vocera del gobernador, Gina Domínguez Colío, recomponga su desastroso arranque... Buena se la hicieron al ex alcalde de Coatzacoalcos, Iván Hillman Chapoy. Llegó al evento de toma de posesión de Karime Macías Tubilla como presidenta del DIF estatal, este domingo 5, y para él no había reservado lugar ni aposento. Se tuvo que ir a galerías con su corte de perdedores —Gustavo Linares, represor de colonos cuando era secretario de gobierno municipal; Norma Martínez Cuervo, redactora de boletines indescifrables, y Martha Pineda Tapia, cheff de barbacoa de perro, sobre quien pesa una investigación de la PGR—, la crema y nata del Grupo Integra. Iván Hillman, el notario de la fidelidad, llegó tarde pero ni falta hizo en la ceremonia real de Karime I, nueva majestad en el feudo jarocho... Y el que armó su show en la entronización de Karime de Duarte, fue el líder del PRI en Coatzacoalos, Juan de Dios Sánchez Abreu. Usurpó espacios ajenos y no hubo poder humano que lo hiciera moverse del asiento reservado para un diputado local, que sensatamente desistió de pelear por la butaca del robusto dirigente priísta. Su hermano, Luis Felipe Sánchez Abreu, mejor se alejó para acomodarse donde fuera. “A partir de ahora va a dejar de crecer políticamente”, dijo el legislador en alusión al Gordito de Oro Sánchez Abreu...
 
Hay muchos católicos que no se explican qué hacía el alcalde electo de Coatzacoalcos, Marco César Theurel Cotero, en la obra de teatro juvenil promovida recientemente por la iglesia protestante “Comunidad de Dios”, jefaturada por el pastor Claudio Martínez. Marcos Theurel y su familia son miembros de la élite católica local, impulsores de la construcción de la catedral de San José e influyentísimos en una agrupación de amplio peso como es Caballeros de Colón. Cualquiera con un poquito de imaginación podría suponer que Marcos Theurel va a todas y en la Comunidad de Dios estaría pepenándole votos y afectos al protestantismo crisitiano. En política todo se vale...
 
Mal pagados los operadores priístas que estuvieron al servicio del marcelismo en los últimos tres años en Coatzacoalcos. Cobraban como coordinadores políticos en diversos puntos del municipio no más de 2 mil pesos quincenales. Así aparecen los recibos de pago de dos de ellos: el doctor Liceaga y José Gómez. Con todo y todo no dejaron de trabajar para la causa...
 
¿Quién es ese periodista que hace unos ayeres se embriagó a tal grado en el centro nocturno de Suites Maviels, que terminó vociferando incoherencias y sin ropa en plena banqueta, frente al hospital regional? Cuando llegó la policía, identificado por los uniformados el briago de marras, se reportaron vía radio los desfiguros, la altanería y los efectos de rendirle culto desenfrenado al dios Baco. Acudió de inmediato el priísta Víctor Zavaleta, quien portando una sábana impidió que el columnista continuara exhibiendo sus miserias y lo retiró del lugar. ¿Quién pudo ser? Sí; le atinó...

¿Te ha parecido interesante la columna?

Comentarios

Comparte
La vista se no puede mostrar porque supera el umbral de vista de lista (5000 elementos) aplicado por el administrador.

Para ver los elementos, intente seleccionar otra vista o crear una nueva. Si no cuenta con permisos suficientes para crear vistas para esta lista, solicite al administrador que modifique la vista de modo que cumpla con el umbral de vista de lista.

Más información sobre la creación de vistas para listas grandes.