Para la Real Academia de la Lengua, un pendejo además de ser una persona cobarde y pusilánime, también es astuta y taimada. Pusilánime por su incapacidad para enfrentar los problemas pero con sobrada astucia y verborrea para hacer creer que lo contrario. Total, que como bien afirmaba Facundo Cabral, asesinado por manos cobardes en Guatemala, lo que sobran son los pendejos.

 

En uno los monólogos que acostumbraba compartir a los asistentes a sus conciertos, dictó para la posteridad: "Mi abuela decía: '¡Habría que acabar con los uniformes que le dan la autoridad a cualquiera!' ¿Qué es un general desnudo? ¡Y tenía razón! Y tenía derecho a hablar de esto, porque estuvo casada con un coronel que era realmente un hombre valiente, solo le tenía miedo a algo…a los Pendejos.

 

Un día le pregunté por qué y me respondió: Porque son muchos y no hay forma de cubrir semejante frente. Y por temprano que te levantes a donde quiera que tu vayas, ya está lleno de pendejos, y son peligrosos porque al ser mayoría eligen hasta al Presidente! Los hay de toda categoría por ejemplo esta: El pendejo informático: que es un pendejo computado.

 

El pendejo burócrata: que es oficialmente pendejo. El pendejo optimista: que cree que no es pendejo. El pendejo pesimista: que cree que es el único pendejo. El pendejo esférico: que es pendejo por todos lados.

 

El pendejo fosforescente: porque de noche se ve que por allá viene un pendejo. El pendejo de referencia: Alberto, donde estás? ah ya te vi, al lado del pendejo de la chaqueta gris. El pendejo consiente: porque él sabe que es pendejo. El de sangre azul, porque es hijo y nieto de pendejos.

 

Y el más peligroso de todos: El pendejo demagogo, que cree que el pueblo es pendejo"... Así era Facundo Cabral, libre y pensante... Que estás palabras nos sirvan de reflexión a los gobernados... TODO PARECE INDICAR que por un falso rumor, gran parte de la población cayó en psicosis la noche del lunes.

 

Algún desconocido que se encargó de difundir el toque de queda, algunos aseguran que escucharon el perifoneo en un vehículo particular, no se pudo confirmar, ya que se recorrió la ciudad a la caza de la supuesta unidad y no se le localizó.

 

No obstante, para los comerciantes que trabajan en la noche el rumor les provocó pérdidas, por ejemplo a los dedicados a la venta de hamburguesas y hotdog, sus panes, salchichas y todo lo que utilizan para su preparación, lo tuvieron que regresar a casa, porque cuando llegaron al centro de la ciudad, había una fuerte movilización.

 

Todos cerraron sus puertas, los taxistas se fueron a guardar sus vehículos, igual que los dulceros del parque. Por su parte el Ejército, en ningún momento confirmó ni descartó que ellos hayan alarmando a la población, lo cierto es que hubo ciudadanos que preocupados porque tienen hijos que laboran en tiendas de autoservicio y salen después de las diez de la noche, acudieron a la Base de Operaciones del 44 batallón de infantería, situado en el boulevard Antonio M. Quirasco, frente a la tienda Aurrera, para preguntar si era cierto el toque de queda, pero vaya sorpresa que se llevaron, el trato brusco y prepotente.

 

“No hay nada, no hay nada, retírese, órale”, fue la expresión de un soldado que estaba de guardia a la entrada del cuartel. Las autoridades municipales ayer aseguraron no haber recibido ninguna notificación, lo mismo confirmó la Agencia Veracruzana de Investigación y todo parece indicar que fue una falsa alarma, pero mientras son peras y manzanas, Las Choapas el lunes después de las diez de la noche, era un pueblo fantasma. (Comentarios y tips a [email protected])