Abusos tras abusos son los que cometen los policías municipales que comanda Wilfrido López Vicente, a todos ven sospechosos y a todos quieren golpear, al fin, que sus patrones lo toleran y están acostumbrados a pisotear la ley como lo hace su jefe Renato Tronco Gómez.

 

En la agencia del Ministerio Público se acumulan las denuncias por abuso de autoridad, pero hasta la fecha ninguna es consignada por el titular, Heriberto Estrada Zamudio.

 

Los policías han cometido arbitrariedades de manera continua y han cometido vejaciones incluso hasta con mujeres detenidas de manera injusta como sucedió recientemente con la empleada de una fonda de la colonia México a quien vieron como sospechosa cuando viajaba en un taxi y por eso la detuvieron; luego de más de nueve horas fue liberada tras pagar una multa de 600 pesos. Hay elementos buenos y hay elementos malos, como dijera Tronco en una ocasión “hay zetas buenos y zetas malos”.

 

Sí, en la comandancia hay de todo, tanto elementos que procuran trabajar apegado a derecho y que eso les ha permitido estar por más de 12 años en la corporación y hay también los que tienen sus negros antecedentes pero que gracias los palancazos y las amistades que tienen con algunos oficiales han conseguido acomodarse en las filas policíacas, pero son quienes se han encargado de cometer abusos y atropellos contra los civiles.

 

Los oficiales Daniel Zapata Alcudia (El Zapata) y Juan José Trinidad Pimienta (El Pegaso), son dos policías con mando de primer oficial que han hecho lo que han querido durante la primera administración de Renato Tronco, pero los elementos cansados de sus abusos y humillaciones decidieron hablar y quejarse ante Wilfrido López Vicente, el director de la corporación, consiguiendo con ello que a Zapata le quitaran el cargo de Jefe de Servicio, lo que le dolió hasta el fondo de su corazón, porque nunca se imagino que le cortaran esas alas; el otro sigue impune, pero ya le bajó de tono porque teme que a él también le pase lo que le ocurre a su compañero.

 

No han sabido medirse, maltratan a sus compañeros sólo por el hecho de ser primer oficial, pero acuérdense que todo lo que sube tiene que bajar. Esas confrontaciones podrían tarde o temprano tener sus consecuencias graves, porque seguramente habrá algún policía que se sea ofendido en sus cinco minutos que está fuera de casilla y podría hacer uso de su arma contra el oficial.

 

Y EN CUANTO A MERCEDES ROBLES ANTONIO, titular de la agencia Especializada en Delitos Sexuales contra la Familia, la Mujer y el Niño debe prender los focos rojos, porque los delitos de violación se han disparado durante los últimos dos meses y apenas el lunes una familia de la zona serrana de Nuevo Ixtacomitan puso en alerta lo que ocurre en esa región, donde niñas de 12 y 15 años ya son esposas y con hijos, pero más que eso, son utilizadas como esclavas sexuales de hombres mayores de edad. La agencia especializada dejó de realizar campañas de prevención en la zona rural y en colonias.

 

A su regreso a este municipio, la fiscal Robles Antonio llegó menos entusiasmada, nada cómo la primera vez que estuvo a cargo de esa misma dependencia donde se reflejaba el interés y se prevenía el delito mediante pláticas tanto a padres de familias como estudiantes. También hace falta que el personal que tiene a su cargo sea más comprensiva y tolerante, que no maltrate a quienes llegan a pedir una asesoría, si amanecen con mal humor, que lo dejen en su casa, antes de llegar al trabajo.

(Comentarios y tips a [email protected])