Colonias como Allende, Kilómetro Dos, Obrera, Centro y partes de la congregación de Tonalá constantemente sufren por apagones nocturnos provocados por el sobrecalentamiento de las líneas de CFE.
Colonias como Allende, Kilómetro Dos, Obrera, Centro y partes de la congregación de Tonalá constantemente sufren por apagones nocturnos provocados por el sobrecalentamiento de las líneas de CFE.
El termómetro en la ciudad hidrómila supera los 33ºC, con sensaciones térmicas mayores a los 35ºC, en tanto que las fallas de energía eléctrica en distintos sectores del municipio agravan el intenso calor, especialmente durante las noches, al no poder funcionar los aparatos de ventilación.
Colonias como Allende, Kilómetro Dos, Obrera, Centro y partes de la congregación de Tonalá constantemente sufren por apagones nocturnos provocados por el sobrecalentamiento de las líneas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Expertos de la CFE han explicado que durante esta época de calor es cuando más reportes por fallas en el tendido se tienen, puesto que la demandan de energía aumenta porque más ciudadanos encienden aparatos como aires acondicionados o ventiladores durante las noches.
Esto provoca que las líneas se sobrecalientan, especialmente si existen “diablitos”, pues según explica personal de la Comisión de Electricidad, el tendido está diseñado para soportar un promedio estimado entre los usuarios legales, pero en la práctica se consume más energía y eso genera los incidentes.
Uno de los últimos casos ocurrió alrededor de las 13:00 horas, cuando el ciudadano Oscar Laureano Morales reportó que en la calle Francisco I. Madero, en la colonia Cuatro Caminos, había cables de energía incendiándose a la altura de la “enramada disco”.
Personal de Protección Civil tuvo que cortar el suministro de energía en esa zona para poder retirar una serie navideña que sufrió un cortocircuito, tras lo cual se restableció la distribución eléctrica en el área.
En promedio, señaló Celestino Segundo Hernández, director de Protección Civil, se reciben entre dos y tres reportes semanales de cables echando chispas o en mal estado, lo cual afecta en total a cientos de familias hidrómilas, especialmente en esta temporada de calor.