Venta de Pemex e inseguridad, discurso de AMLO en el sur

​Ante la asistencia promedio de más de 1500 personas, a las asambleas informativas de Morena en Las Choapas y Agua Dulce, Andrés Manuel López Obrador fustigó la persecución política del gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares y denunció graves casos de corrupción que han provocado la quiebra de la industria petrolera con la consecuente pérdida de miles de empleos.

En Las Choapas, el tabasqueño llegó cerca de las 10:30 horas de la mañana para después dirigirse a Agua Dulce, al mediodía. 

Estuvo acompañado por Eva Cadena Sandoval, diputada con licencia; Manuel Huerta Ladrón de Guevara, presidente estatal de Morena; Sergio Guzmán, delegado de Morena en Agua Dulce; así como Amado Cruz Malpica, diputado local y los diputados federales Rocío Nahle y Cuitláhuac García. 

El discurso de Cuitláhuac García y Andrés Manuel López Obrador tocó temas referentes a las principales problemáticas de la región como la inseguridad y la crisis en el sector petrolero. 

López Obrador se refirió a la Fuerza Civil de Javier Duarte como "un fracaso que atizó la violencia en el estado" al igual como expuso las estrategias de combate al narcotráfico que emprendió Felipe Calderón Hinojosa, porque indicó que "no se puede atacar la violencia con la violencia". 

En entrevista con este medio, Andrés Manuel también condenó el asesinato de periodistas y agresiones en Veracruz, pues señaló que debe existir respeto y garantías a quienes desempeñan esa profesión. 

En referencia al daño patrimonial de Agua Dulce, que el ORFIS dictaminó por 5.6 millones de pesos, AMLO comentó que es consecuencia de la corrupción en todas las escalas. 

En Las Choapas, López Obrador reconoció el abandono del sector agropecuario, mientras que en Agua Dulce se refirió a los habitantes como "paisanos", pues recordó haber vivido en esa ciudad durante su juventud. 

Durante ambos eventos, pequeños grupos de manifestantes lanzaron consignas en contra de los candidatos designados por Morena en dichas ciudades.

"Vamos a respetar el derecho de manifestación, pero yo espero que sea legítima porque anda gente de Franco Castán, el secretario de Gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares", expuso AMLO frente al micrófono, vinculando de esta forma a los manifestantes con el Gobierno estatal. 

"No nos peleemos, aquí hay que unirnos. El problema está allá arriba con los de la mafia del poder", sentenció Obrador ante militantes y simpatizantes, a quienes expuso la situación actual de la industria petrolera en el sur, específicamente sobre Pajaritos, una planta de fertilizantes y la petroquímica de Braskem-Idesa que relaciono con la serie de millonarios sobornos por parte de Oderbrecth hacia funcionarios en el tiempo de Felipe Calderón para obtener contratos. 

"Duarte y Yunes son lo mismo. Duarte es ratero y Yunes es ladrón, es la única diferencia que puede haber entre ellos", concluyó AMLO no sin antes despedirse con una de sus características frases: "A mí me pueden llamar peje pero no lagarto".