Cuando el Gobernador aumenta la presión contra grupos delincuenciales, registro revela que el tono de la violencia aumenta.
Cuando el Gobernador aumenta la presión contra grupos delincuenciales, registro revela que el tono de la violencia aumenta.
El gobernador Miguel Ángel Yunes Linares anunció un fondo de recompensas para blancos de organizaciones criminales; la respuesta del hampa fue inmediata: dos personas descuartizadas y abandonadas en bolsas frente al despacho particular de su Secretario de Seguridad Pública, Jaime Téllez Marié.
Un día después de haber señalado que no tiene nada que cuestionar al secretario, pese a señalamientos que los grupos criminales le han dejado a su colaborador, nuevamente apareció un cuerpo desmembrado y con otro mensaje al titular de la SSP.
Es la constante en los reforzamientos de seguridad que ha emprendido el gobernador panista; a cada anuncio, le sigue una oleada de violencia que en sus primeros seis meses ha dejado un total de 757 muertes violentas, hasta mayo.
Mientras el mandatario insiste en señalar que los enfrentamientos son producto de pugnas entre los grupos del crimen organizado, Veracruz se desangra cada vez más con cada anuncio. Esta es una radiografía de los casos más emblemáticos.
Febrero/marzo: Gendarmería y reguero de cuerpos
Hacia finales de febrero, el gobernador subió un video a sus redes sociales anunciando reuniones con el gabinete de seguridad del gobierno federal. En él, enfatizaba que la insistencia de la Gendarmería en territorio veracruzano había dado frutos y era cuestión de días para su ingreso.
En respuesta, la madrugada del martes 28 de febrero, se registró un enfrentamiento a balazos entre personas armadas y personal militar, de la Fuerza Civil, Secretaria de Seguridad Publica y Fiscalía General del Estado (FGE) en el fraccionamiento Villa Rica del puerto de Veracruz.
La refriega duró más de dos horas y fue tal, que helicópteros de las fuerzas del orden debieron llegar a reforzar el operativo, que dejó una vivienda destrozada y al menos dos personas muertas.
Ese mismo día, en Córdoba, el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se reunió con el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, así como con autoridades estatales y municipales para oficializar el ingreso de la Gendarmería Nacional a territorio veracruzano.
Además se informó que se tenían ubicados a los objetivos específicos por los que iban a ir las autoridades.
La respuesta fue contundente: en las horas posteriores, 11 cuerpos con huellas de tortura fueron abandonados en una camioneta en la zona de la Tampiquera, en Boca del Río, el bastión del hijo del gobernador, Miguel Ángel Yunes Márquez
Entre los cuerpos había dos mujeres, todos con evidentes señas de violencia; algunos estaban tirados en la calle, mientras otros quedaron en el interior del vehículo.
El 1 de marzo, el mandatario puso en marcha el operativo especial en la capital del estado, donde sus primeras palabras fueron para señalar que las personas muertas eran criminales.
Marzo/abril: Sedena y secuestro de un colaborador
El 23 de marzo el Secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, se reunió en Tuxpan con el gobernador Yunes Linares, donde este solicitó la participación de la Policía Militar en los distintos operativos que se realizan para abatir la incidencia delictiva.
El 5 de abril, con todo y el respaldo de la Sedena, un comando armado secuestró a Martín Cordero Luqueño, director de Seguridad Ciudadana del ayuntamiento de Boca del Río. El general retirado fue liberado horas después.
Días más tarde, las autoridades capturaron a Juan Manuel "N", líder de una organización criminal, acusado de haber coordinado dicho secuestro.
Abril: Policía Militar y secuestro y asesinato de maestra y menor
Apenas entre el 7 y el 8 de abril el gobernador anunció la llegada de la Policía Militar a Veracruz, y un día después, el 9, un menor y una maestra fueron secuestrados en Tantoyuca; el 24 de ese mes, sus cuerpos aparecieron en un paraje.
Mayo: más cuerpos
Aunque en mayo no hubo nuevos reforzamientos, el 11 en diversos puntos de la conurbación Veracruz-Boca del Río, volvieron a aparecer algunos cuerpos, esta vez cinco, con huellas evidentes de tortura.
Junio: carteles y descuartizados
El 19 de junio, el gobernador anunció un nuevo reforzamiento que tendría lugar a partir del 21, con la colocación de carteles de recompensa con las fotos de los objetivos del Gabinete de Seguridad en el estado: la respuesta fue aún más grande.
Ese 21 un grupo delictivo abandonó al menos siete bolsas con dos cuerpos descuartizados, y con ellas, cartulinas dirigidas al titular de la SSP, Jaime Téllez Marié.
Un día después, el 22, el mandatario respaldó a su colaborador señalando que no tiene nada que cuestionarle con respecto a supuesta protección a grupos de la delincuencia organizada: nuevamente estos grupos respondieron dejando dos cuerpos descuartizados en Poza Rica y Amatlán, con más mensajes para el secretario.
En respuesta, este viernes 23, el gobernador se paseó con su secretario en las calles de esta capital y desayunó con él en un café cercano al Palacio de Gobierno.