Según las indagatorias, El Ojos compró una flotilla de motos que convirtió en mototaxis para que sus conductores le sirvieran de “halcones” y narcomenudistas.
Según las indagatorias, El Ojos compró una flotilla de motos que convirtió en mototaxis para que sus conductores le sirvieran de “halcones” y narcomenudistas.
Felipe de Jesús Pérez Luna, alias “El Ojos”, líder del cártel de Tláhuac tenía varios negocios aparte de la extorsión, secuestros, homicidios y venta de droga en las inmediaciones de la delegación Tláhuac, Milpa Alta, Xochimilco e Iztapalapa.
Así lo informó Edmundo Garrido Osorio, procurador general de Justicia de la Ciudad de México, quien añadió que la banda no da “el ancho” como para catalogarla como un cártel en todo el sentido de la palabra, sin embargo, es una banda muy grande a la que desde el 2016 se le han realizado 30 detenciones en la zona.
De acuerdo con las investigaciones de la PGR, Pérez Luna controlaba el tráfico de droga en la ciudad y estaba vinculado con más de una veintena de asesinatos, la mayoría torturados y embolsados.
Según las indagatorias, El Ojos compró una flotilla de motos que convirtió en mototaxis para que sus conductores le sirvieran de “halcones” y narcomenudistas.
Algunos de ellos han encabezado cierres de calles, manifestando su apoyo al presunto delincuente, como los registrados el pasado jueves, luego de que El Ojos fue abatido por elementos de la Semar.
El periódico El Universal informó que desde marzo de 2016 inició una guerra en la zona entre narcomenudistas por la disputa de, por lo menos, 30 puntos de venta en Tláhuac y delegaciones vecinas. Además se le relaciona con la venta de drogas en Ciudad Universitaria.
En septiembre pasado se realizó un fuerte operativo policiaco que buscaba detener a El Ojos, pero no se tuvo suerte.
También se le imputa una guerra con “La Unión”, cártel que opera en la zona de Tepito, puesto que, a decir de las investigaciones de las autoridades, desde 2014 ha surtido de diversas drogas por año a unas 2 mil “tienditas” que tiene en su poder.
Desde noviembre del año pasado, la Procuraduría capitalina mantenía un operativo con agentes encubiertos en las inmediaciones de la delegación Tláhuac, en busca del presunto líder criminal, pero fue hasta este jueves cuando personal de la Secretaría de Marina Armada de México lo abatió junto a otros siete presuntos criminales.