Las claves para salvar la vida durante un sismo

​Las Choapas y Agua Dulce no están exentos de sufrir movimientos telúricos de importancia, pues a pesar de que se ubican relativamente lejos de las zonas de subducción de las placas tectónicas, se ha demostrado con anterioridades que se han generado sismos a pocos kilómetros de estas ciudades.

El 7 de abril de 2011 con una magnitud grande de 6,7 grados se produjo el terremoto más fuerte de ese año en el territorio nacional y tuvo como epicentro la ciudad de Las Choapas. La duración del sismo fue mayor a 1 minuto, sintiéndose desde el Centro de México hasta Guatemala y fue trepidatorio y oscilatorio. 

Además, relacionados o no con la actividad petrolera, los registros de años anteriores dan cuenta de sismos con epicentros apenas a 70 kilómetros al suroeste de Las Choapas, como el de 4.2 grados Richter que se registró el 29 de junio de 2016. y luego el 6 de julio hubo otro a 59 kilómetros al sur de Las Choapas.

Tan sólo en este año se han registrado tres sismos los suficientemente fuertes o cercanos como para sentirse en Las Choapas: en mayo, uno de 5.4, en Chiapas; y los dos de este mes de septiembre, con epicentros en las costas de Oaxaca y en Puebla, respectivamente. Por eso ante este tipo de movimientos es importante saber qué hacer antes, durante y después de un sismo, tal como lo recomendó la Cruz Roja. 

Entonces ¿Qué hacer?

Antes de un sismo se deben identificar los sitios de alto riesgo de las casas, centros educativos o lugares de trabajo; definir de forma participativa el plan de emergencia en caso de un sismo, así como las rutas para evacuación de la vivienda; conocer la ubicación y la forma de cerrar los registros de agua, gas y dónde cortar la electricidad; y tener listo un paquete para emergencias con botiquín de primeros auxilios, radio y pilas con repuesto, linterna y pito, reserva de comida y agua, verificando con frecuencia la fecha de vencimiento y su estado y un plástico para la intemperie.

Durante un temblor lo más importante es mantener la calma, no salir corriendo y evitar el pánico, pues este puede ser tan peligroso como el terremoto; activar el plan familiar de emergencia; si estás dentro de una edificación y no puedes salir, buscar un sitio seguro para protegerte y alejarse de ventanas, libreros, espejos, plantas colgantes, y otros objetos pesados que puedan caer.

Lo que no debes hacer es esconderte en el umbral de la puerta. Es un mito peligroso, ya que si no no tiene una trabe, puede que el umbral se te caiga encima. Salir corriendo a la calle si estás a un nivel más alto que el segundo piso también es riesgoso, pues las escaleras y los elevadores son extremadamente peligrosos durante los terremotos.

En cuanto sientas el temblor, asegúrate de que no hay nada cerca que se pueda caer encima. Adoptar la posición fetal cubriendo la cabeza con las manos para protegerla es una buena medida. Cerca de un sillón o una cama posible, pero sin esconderse debajo, es una técnica conocida como el “triángulo de la vida”, pues en caso de que se caiga un mueble o el techo,  estos objetos absorben el golpe y se crean espacios abiertos.

Después de un sismo se debe verificar el estado de las casas o lugares de trabajo antes de reingresar. Si hay grietas, muros inclinados o se escuchan crujidos o ruidos de rompimiento no  se debe ingresar hasta que el inmueble haya sido revisada por personal experto; si te encuentras atrapado, avisa mediante gritos, ruidos, pitos o si te es posible a través de tú teléfono celular; si estás fuera y están funcionando los teléfonos o celulares, sólo úsalos por periodos cortos para no saturar las telecomunicaciones; aplica los primeros auxilios a las personas lesionadas, si estás capacitado; hay que interrumpir tan pronto sea posible los servicios de gas, agua y electricidad; y reunirse con familiares en un lugar seguro.

A veces después de los sismos vienen réplicas, pero no es una regla. Tampoco se pueden prevenir, pronosticar o augurar, por lo que evitar compartir información incorrecta es importante para evitar pánico entre la población.