El maestro lleva 23 años dando clases, perdió dos dedos luego de que la barda que le cayó le machacó, literalmente, la mano. También sufrió una fractura en la columna.
El maestro lleva 23 años dando clases, perdió dos dedos luego de que la barda que le cayó le machacó, literalmente, la mano. También sufrió una fractura en la columna.
El maestro de secundaria Javier Pacheco dio su testimonio a los medios de comunicación luego de que se conociera su experiencia en el sismo de este 19 de septiembre.
En plena crisis y con el afán de proteger a sus alumnos, pacheco expuso su vida con tal de no perder a quienes estaban a su cargo; el docente perdió varios dedos luego de que vio como una niña bajaba por las escaleras de la secundaria número 52 en Ecatepec y una barda le cayó, sin embargo, al docente le alcanzó a destrozar parte de la mano izquierda.
Lamentablemente la menor falleció en el accidente ya que la barda era lo suficientemente pesada como para sepultarla.
“La alumna a la que él trató de proteger cuando se vino la barda falleció, entonces yo creo que todavía falta que asimile y pueda manejar esa situación”, explicó María de Jesús Kim Valdivia, doctora del Hospital 1 de Octubre del ISSSTE.
El maestro lleva 23 años dando clases, perdió dos dedos luego de que la barda que le cayó le machacó, literalmente, la mano. También sufrió una fractura en la columna.
Al momento del sismo el profesor de Ciencias se encontraba repartiendo material para que sus alumnos hicieran una historieta, y apenas empezó el temblor no hizo más que seguir el protocolo.
“Bajamos a los niños y al último baja el maestro. Yo me voy atrás de ellos apresurándolos para que bajaran rápido, cuando bajo al último, se cayó la barda, era una niña que quedó ahí aplastada, era mi alumna”, relató.
Desde el hospital, el docente asegura que no es un héroe, porque salvaguardar a sus alumnos era lo que debía hacer.
“Yo creo que actuó por instinto, ese instinto de proteger a alguien que estaba a su resguardo, que son alumnos, y entonces aunque él no lo considere, yo creo que sí se puede considerar como un acto heroico”, opinó su doctora, María de Jesús Kim Valdivia para Excelsior.