Hasta más del 50% han decaído las ventas en los negocios ubicados en el primer cuadro, debido a la inseguridad y falta de infraestructura pública.
Hasta más del 50% han decaído las ventas en los negocios ubicados en el primer cuadro, debido a la inseguridad y falta de infraestructura pública.
Comerciantes del centro de la ciudad han sufrido una fuerte caída en el volumen de sus ventas, hasta por debajo de la mitad de años anteriores, tal como lo ejemplificó Javier García de la Cruz, propietario de la taquería “El Primo”.
El conocido negociante hidrómilo, quien actualmente cuenta con una sucursal en la zona de “el repasto”, dijo que la actividad ha bajado y por esa falta de clientes las ventas han caído, en algunas ocasiones, hasta en un 80% mientras que el promedio de ventas es del 50% respecto a otros períodos.
“Por ser la zona del mercado debería ser muy visitada, pero hay mucha competencia, muchos negocios y poco dinero”, lamentó el entrevistado, quien recientemente tuvo que cerrar la sucursal ubicada a un costado de Bancomer, en la calle Francisco I. Madero, debido a que no había suficientes clientes.
A pesar de estar ubicado en el primer cuadro de la ciudad, la falta de estacionamiento evita que los compradores bajen y recorran las aceras para adquirir sus productos, de modo que muchos prefieren detenerse sobre el arroyo, bajar a retirar dinero del banco e irse y hacer las compras en otras partes de la ciudad.
Aunado a esta situación de infraestructura pública, la inseguridad también aleja a los transeúntes, la mayoría de los cuales prefiere ya no caminar por el centro después de las 18:00 horas, de modo que la actividad de peatones es mucho más baja que hace una década, por ejemplo.
Por este motivo, comenta Javier García, ha decidido también quitar el turno nocturno, lo que ha provocado un duro impacto en la economía de su negocio, lo cual prefiere sobre la situación de inseguridad que reina en Agua Dulce, sobre todo a raíz de aquella jornada de saqueos a principios de este año.
“No nada más somos nosotros, lo vemos con nuestros vecinos y no vemos por dónde va a mejorar esto”, comenta el propietario de la taquería “El Primo”, una de las más conocidas de la ciudad, sobre la situación del municipio en donde el desempleo se ha agravado en estos últimos años.