Palacio Municipal tiene deficiencias de seguridad

​El Palacio Municipal de Agua Dulce alberga la mayoría de las oficinas públicas de la ciudad y es la sede del Gobierno local, pero se trata de un edificio con deficiencias en materia de seguridad y protección civil, lo cual significa un riesgo para quienes trabajan ahí o acuden a realizar algún trámite.

Compuesto por una planta baja y tres pisos superiores, sólo cuenta con una salida de emergencia en la parte más alta, que da directamente a un techo y una serie de escaleras, áreas consideradas las más peligrosas en caso de una contingencia.

Dicha puerta se encuentra cerrada en varias ocasiones por razones de seguridad física cuando se realizan los pagos de nómina, sin embargo, en caso de que ocurriera un siniestro, los ocupantes de las plantas superiores por fuerza tendrían que bajar todos los pisos hasta la planta baja para poder salir del inmueble.

La alarma para anunciar el desalojo de los trabajadores y ciudadanos también se encuentra hasta el último piso y en realidad sólo es una chicharra cuya activación requiere que alguien se mantenga apretando un botón, de modo que o no habría quien activara la alarma para la evacuación o esa persona debería quedarse ahí aún con su vida en riesgo.

Después de los sismos del pasado mes de septiembre, la estructura tampoco fue revisada a profundidad y recientemente se descubrieron importantes grietas en zonas que comúnmente se consideran las más fuertes de una estructura, por lo que podría haber daños a nivel interno, como se puede observar en el vano de la puerta que da hacia la Biblioteca Municipal.

En esa zona una grieta avanza de forma vertical y luego horizontal a lo largo del marco y la trabe superior, lo que indica un potencial peligro para el edificio que cuenta con varias décadas de funcionamiento y mínimo mantenimiento preventivo y correctivo.

Agua Dulce está considerado dentro de una zona con una sismicidad importante, además de incluirse en el área de riesgo de inundaciones y huracanes, mientras que los incendios tampoco se descartan por fallos en las instalaciones eléctricas, por ejemplo.

El palacio municipal de Agua Dulce a diario recibe cientos de visitantes, además de que congrega a más de 300 empleados de diversas áreas, por lo que se trata de un edificio público con una cantidad importante de personas que se mantienen bajo condiciones de riesgo ante el desinterés de las mismas autoridades que ahí trabajan.