Luego de más de 40 horas de angustia, madres, esposas y familiares de los 16 policías estatales detenidos por desaparición forzada, lograron tener contacto físico con los detenidos.
Luego de más de 40 horas de angustia, madres, esposas y familiares de los 16 policías estatales detenidos por desaparición forzada, lograron tener contacto físico con los detenidos.
Luego de más de 40 horas de angustia, madres, esposas y familiares de los 16 policías estatales detenidos por desaparición forzada, lograron tener contacto físico con los detenidos.
Una a una las familias fueron llegando hasta las afueras del Penal de Pacho Viejo desde el martes en la madrugada, cuando se les notificó de la detención. Son más de 30 personas que se han movido de un lado a otro esperando tener contacto con su familiar.
“A mi marido le dijeron que se presentará que iba a ir al carnaval”, “Mi hijo tenía funciones de administración, no salía a operativos”, “Él no debe nada, si debiera que pague, pero no se vale, lo trataron como delincuente”, es un poco de lo que se puede escuchar por los pasillos y la explanada de la sala de juicio orales han estado de forma permanente.
Los policías fueron detenidos el martes alrededor de las 7.30 en el cuartel de San José, de ahí fueron trasladados al Penal de Pacho Viejo a las dos de la madrugada del jueves, donde se presentaron a la primera audiencia al mediodía, pero no habían podido tener contacto directo con sus familias.