La vista se no puede mostrar porque supera el umbral de vista de lista (5000 elementos) aplicado por el administrador.

Para ver los elementos, intente seleccionar otra vista o crear una nueva. Si no cuenta con permisos suficientes para crear vistas para esta lista, solicite al administrador que modifique la vista de modo que cumpla con el umbral de vista de lista.

Más información sobre la creación de vistas para listas grandes.

Roberto Morales Ayala

Zona Franca

¿Y los méritos de Xóchitl Tress?

21/03/2014 07:58 a.m.

Javier Duarte es un gobernador de acciones polémicas. Tiene a su lado a sus amigos y luego los despide; recicla al fidelismo, le da poder ilimitado y finalmente trae a su gobierno a personajes marcados por la corrupción, el escándalo y los negocios non sanctos.

 Es reacio a la crítica. Los periodistas lo irritan. Se enfurece cuando se cuestiona la marcha de Veracruz y mucho más cuando se le documentan casos de abuso de autoridad, atropello y represión. Y lo hace así porque de alguna manera oculta su incapacidad para gobernar.

 Carente de formación política, llegó a gobernador porque así lo decidió su mentor, Fidel Herrera Beltrán. Llegó para cubrirle la espalda a Fidel, para ocultar el océano de corrupción y para consumar sus propios negocios. Llegó para perpetuar la fidelidad en Veracruz.

 Un gobierno así no puede estar al margen de conflictos, de errores, de insuficiencias. No está a la altura de Veracruz pues se privilegian los negocios del grupo que detenta el poder en detrimento de las clases media, baja y paupérrima, que cada vez es mayor.

 Presionado porque el tiempo pasa y Veracruz se estanca, Javier Duarte ha recurrido a la vieja treta de cambiar y dejar todo igual. Ha hecho enroques, removido funcionarios, quitado a unos, puesto a otros, fidelistas van y fidelistas vienen. Y todo se mantiene así. Su gobierno siempre está en el ojo del huracán.

 Sin embargo, de todas, la nueva chiripada cometida al designar en la Dirección de Espacios Educativos de la Secretaría de Educación de Veracruz a Xóchitl Tress Rodríguez equivale a una bomba de tiempo que se lleva entre las patas al Presidente Enrique Peña Nieto por aquello de la educación y de su reforma en la materia.

 Xóchitl Tress no es lo que pudiera decirse el símbolo de la educación ni la precede un historial de logros administrativos o experiencia acumulada en el manejo de recursos para la construcción de escuelas.

 No. Xóchitl Tress viene de la tragedia familiar y del escándalo por un amorío. Y hasta ahí.

 A Xóchitl Tress se le recuerda por la muerte de su marido, el alcalde electo del municipio de Juan Rodríguez Clara, Gregorio Barradas Miravete, que siendo diputado federal panista había puesto en su lugar a Fidel Herrera Beltrán por las campañas priistas de 2007 y que había evidenciado —y así lo dijo en la Cámara de Diputados— financiamiento del narcotráfico a favor del PRI.

 Gregorio Barradas fue asesinado el 8 de noviembre de 2010 en Tuxtepec, Oaxaca, tras ser plagiado por tres individuos en Isla, Veracruz. Con él iban el ex alcalde Omar Manzur Assad y Ángel Landa Cárdenas. Se los llevaron y horas más tarde aparecieron dentro de su vehículo con un mensaje del crimen organizado.

 Xóchitl Tress se convirtió en una mujer dolida por la muerte de quien fuera el amor de su vida, protagonistas los dos de una historia de fantasía. Ella, una joven agraciada, y Gregorio, un vaquero que con esfuerzo llegó a acumular fortuna, dedicado a la ganadería, a la siembra de piña y al comercio de caballos.

 En su funeral, Xóchitl juraría amor eterno a Goyo. Dejaría ahí constancia de su dolor.

 Pero…

 No había transcurrido un año cuando Xóchitl Tress ya tenía un romance con el diputado Rafael Rodríguez, esposo de la ex presidenta municipal de Rodríguez Clara, Amanda Gasperín Burbarela.

 El escándalo estalló al darse a conocer las fotografías en que Xóchitl Tress aparece con poco ropa, en bikini, en ropa interior, con las bubis sin cubrir, y en tórrido amorío con el diputado Rafael Rodríguez, con que el que Gregorio Barradas habría rivalizado antes.

 Ese episodio se dio a conocer cuando Xóchitl Tress contendía por la diputación federal por el distrito de Acayucan, en 2012. Los seguidores de Goyo Barradas le dieron la espalda; los familiares del ganadero expresaron que ella era dueña de su vida, pero terminaron alejada de la joven viuda; los conocedores de aquel antiguo idilio con Goyo Barradas, no sólo en Rodríguez Clara sino en todo el distrito, le darían la espalda.

 Xóchitl Tress no renunció a su candidatura por decisión de su padrino político, Miguel Ángel Yunes Linares, pese al vendaval que se avecinaba. Todavía buscó a Josefina Vázquez Mota, candidata presidencial del PAN; se tomó fotos con ella; obtuvo su respaldo y siguió hasta el final.

 Perdió por sólo cuatro puntos frente a Regina Vázquez Saut, ex alcaldesa de Acayucan. Sólo que los votos de Xóchitl eran legales y los de Regina procedían de la compra de sufragios o de los programas sociales con los que el PRI condiciona a los votantes de escasos recursos. Impugnó ante los tribunales electorales pero nada pudo hacer para revertir la situación.

 Yunista hasta entonces, Xóchitl Tress supo montarse en su tragedia y también en su escándalo. Abandonó las filas del yunismo, se alejó del Partido Acción Nacional y sucumbió al encanto del duartismo, que hoy la convierte en directora del Instituto de Espacio Educativos de la Secretaría de Educación de Veracruz.

 Su nombramiento es del todo polémico. Xóchitl Tress carece de formación educativa. No es avezada en esa materia; no hizo carrera en las filas de la SEV. Tampoco es administradora de recursos públicos y mucho menos de los de origen federal.

 Espacios Educativos es un área por demás vigilada por la Auditoría Superior de la Federación, dado el manejo de recursos, cuantioso y a menudo susceptible de ser desviados a fines distintos a las tareas relacionadas con la educación.

 Se encarga de diseñar, construir, rehabilitad, dar mantenimiento y equipar escuelas y áreas administrativas y de investigación con estándares de calidad y seguridad para abatir el rezago en materia de infraestructura educativa, según el contenido de su portal electrónico.

 La duda estriba si Xóchitl Tress reúne el requisito mínimo para enfrentar esa tarea o si sólo se le ubicó para golpear al yunismo o para cobrarse Javier Duarte una vieja cuenta política.

 El asunto no es algo trivial. Llega Xóchitl Tress a Espacios Educativos cuando la reforma educativa está en toda su expresión, cuando el Presidente Enrique Peña Nieto requiere que su proyecto sea respaldado por gobernadores con compromiso y cuando de la armonización de las leyes educativas se pase a la creación de escuelas dignas.

 Visto así, la designación de Xóchitl Tress es una burla a Peña Nieto, pues la construcción o mantenimiento de escuelas estará en manos de una mujer cuyo único mérito es haber escandalizado por su fotos en que aparece semidesnuda, exhibiendo los pechos, o por la vida de reina que ahora lleva, con viajes al extranjero, cirugías al por mayor y un conducta de derroche.

 Javier Duarte siempre ha provocado reacciones en contra por sus designaciones de funcionarios sin madurez. Pero esta vez se pasó.

([email protected]) (@moralesrobert)


 


¿Te ha parecido interesante la columna?

Comentarios

Comparte
La vista se no puede mostrar porque supera el umbral de vista de lista (5000 elementos) aplicado por el administrador.

Para ver los elementos, intente seleccionar otra vista o crear una nueva. Si no cuenta con permisos suficientes para crear vistas para esta lista, solicite al administrador que modifique la vista de modo que cumpla con el umbral de vista de lista.

Más información sobre la creación de vistas para listas grandes.